La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo Economía Social, Yolanda Díaz, durante su intervención en el acto
«Este documento aspira a convertirse en la carta magna de los sindicatos y personas trabajadoras en todo el mundo», ha asegurado la ministra, quien también se ha referido a ella como el primer paso para reconstruir el contrato social a nivel global, «una primera piedra en la construcción de una internacional laborista para el siglo XXI».
En la firma solmene de la Carta también han participado la secretaria general de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), Esther Lynch, y el secretario general de la Confederación Sindical Internacional (CSI), Luc Triangle, y también se han sumado a la iniciativa varios países, asociaciones sindicales y de juristas.
El objetivo de este documento marco es que el trabajo decente sea la única forma de trabajo, se garantice un salario justo, se proteja la igualdad de oportunidades y la no discriminación, se blinde la libertad sindical y el derecho a huelga y que se garanticen unos niveles mínimos de protección social. «En definitiva, los derechos laborales son derechos humanos», ha concluido la ministra.
La carta cierra dos días de debates y diálogos en los que se ha reflexionado sobre cómo deben ser los Estatutos del Trabajo del presente siglo, con más democracia económica y la participación de las personas trabajadoras en las empresas, así como las transiciones ecológica y digital sin estrechar derechos, con justicia social, o cómo construir un feminismo laborista que favorezca espacios de trabajo inclusivos y diversos.
En el Congreso Internacional del Trabajo, al que han asistido más de 300 personas entre expertos juristas en materia laboral, líderes sindicales, ministros y ministras de Europa, Asia, América y África, así como eurodiputadas y el comisario de Empleo y Derechos Sociales, se han escuchado también diversas voces a favor de la reducción de la jornada laboral. «Hay que avanzar al horizonte de las 32 horas semanales», ha afirmado la ministra.
«Y para que la reducción de la jornada tenga efectos, debemos blindar el derecho a la desconexión. Porque desconectar no puede ser el privilegio de unos pocos», ha insistido.
Eslovenia acogerá el próximo Congreso Internacional del Trabajo
El debate abierto con este primer Congreso Internacional del Trabajo tendrá continuidad el año que viene con un nuevo congreso para seguir ampliando los derechos laborales y profundizar la democracia. Eslovenia será el país que lo acoja, según ha anunciado Díaz. «La iniciativa nos llena de ilusión en tiempos de desánimo. Estamos creando una internacional de la esperanza en un mundo que puede ser mucho mejor de lo que es ahora», ha señalado confiada.
Reuniones al margen del Congreso
La vicepresidenta ha iniciado la jornada manteniendo un encuentro con la secretaria general de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), Esther Lynch, el secretario general de CCOO, Unai Sordo, y su homólogo de UGT, Pepe Álvarez.
Asimismo, Díaz se ha reunido con su homóloga rumana Simona Bucura-Oprescu, con quien ha firmado un Memorando de Entendimiento centrado en Economía Social. Se trata de la tercera reunión de la vicepresidenta con la ministra rumana, que también se sumó junto Eslovenia y Bélgica al non paper español sobre el futuro de la agenda social europea en esta nueva legislatura.