Una veintena de estudiantes de Latinoamérica plasma sus experiencias en la USAL en la muestra “Salamanca en el mundo: narrativa visual compartida”, organizada por el Servicio de Asuntos Sociales y que se podrá visitar en el Edificio Anayita hasta el 6 de junio.
Se trata de una propuesta colectiva que reúne fotografías y relatos breves, y que busca visibilizar cómo se vive, se transita y se transforma una ciudad desde la experiencia de quienes llegan desde otros territorios.
Frente a los relatos tradicionales sobre la migración y la vida universitaria, “Salamanca en el Mundo” apuesta por una narrativa construida desde abajo, donde cada imagen nace de un proceso participativo basado en la metodología de Fotovoz. No se trata de capturas aisladas o estéticas convencionales: cada fotografía es el resultado de conversaciones, silencios compartidos y emociones difíciles de nombrar. Algunas están acompañadas de textos escritos por las autoras y autores; otras se presentan solas, confiando en la fuerza de la imagen para comunicar lo que no siempre puede decirse con palabras.
La exposición refleja aspectos tan diversos como la nostalgia, el extrañamiento, la adaptación, el choque cultural, la búsqueda de espacios seguros, los pequeños gestos cotidianos que permiten enraizarse, así como las tensiones entre pertenecer y permanecer. A través de las imágenes, emerge una ciudad vista desde márgenes que a menudo pasan desapercibidos.
Este proyecto, enmarcado en “Objetivo: Campus Sostenibles”, no pretende representar una única forma de migrar ni una visión homogénea del estudiantado internacional, sino precisamente mostrar su diversidad de voces, sentires y miradas. Lo que une a estas foto-narrativas no es una identidad compartida, sino el deseo de contar lo que no siempre se cuenta: lo que se piensa, se siente y se transforma cuando se estudia en un país distinto, en una lengua que a veces parece propia y a veces ajena.
Además de ofrecer una lectura visual de la ciudad universitaria desde las vivencias estudiantiles latinoamericanas, “Salamanca en el Mundo” también plantea una crítica al lugar que ocupan, o no ocupan, estas voces dentro de la universidad, la academia y la sociedad.
La exposición reivindica el poder de las metodologías participativas para generar conocimiento desde la experiencia vivida, y la necesidad de crear espacios seguros donde se fomente la escucha, el reconocimiento y la construcción colectiva de sentido.