El presidente de EE.UU., Donald Trump, considera el asesinato de Yaroslav Moskálik, jefe adjunto de la Dirección Operativa Principal del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia, un caso importante y promete analizarlo.
«¡Ese es un [caso] grande! Lo investigaré y les informaré», declaró el mandatario estadounidense a los periodistas a bordo de su avión en camino de Washington a Roma.
Yaroslav Moskálik, jefe adjunto de la Dirección Operativa Principal del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia, murió este viernes como consecuencia de la explosión de un coche en el patio de un edificio residencial en la ciudad de Balashija, en la provincia de Moscú.
Según el Comité de Investigación de Rusia, la explosión fue causada por la detonación de una bomba improvisada cargada con material explosivo.
La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, calificó lo sucedido de «atentado terrorista».
La tragedia se produjo el día del encuentro del presidente ruso, Vladímir Putin, con el enviado especial del presidente estadounidense, Steve Witkoff. La reunión fue calificada por Donald Trump de exitosa.