El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible apuesta por convertir la estación del centro de Toledo en un nodo ferroviario clave para la futura línea de alta velocidad a Extremadura y Portugal. El objetivo es transformar la estructura en una estación pasante y multimodal, resolviendo el trazado de esta línea a su paso por la capital castellanomanchega.
El proyecto, que está diseñando Adif, mantiene la centralidad y el carácter histórico de la estación y plantea un recorrido que respeta el casco urbano monumental, incorporando un viaducto para salvar el río Tajo, que mantiene la visión de la ciudad gracias a su cota reducida. El viaducto cumple condiciones declaración Patrimonio Mundial.
El ministro de Transportes, Óscar Puente, ha abordado esta propuesta con el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, en una reunión celebrada hoy en la sede del Ministerio. Durante el encuentro, en el que también ha participado el secretario de Estado, Jose Antonio Santano, se ha explicado que está opción es la óptima ya que se desarrolla bajo tres premisas fundamentales: mejorar el servicio ferroviario, mantener la centralidad de la estación e impulsar la integración urbana.
Tras la reunión, que ha transcurrido en un ambiente de cordialidad y máxima colaboración, el Ministerio y el Ayuntamiento han acordado crear una mesa técnica para incorporar posibles mejoras a la propuesta planteada, que ya ha salido a información pública. Ambas partes tienden la mano a la Junta de Castilla La Mancha para que se sume a la mesa, priorizando la voluntad de diálogo para que el proyecto salga adelante lo antes posible con el máximo consenso.
La adecuación de la infraestructura ferroviaria a los nuevos tráficos de alta velocidad permitirá incrementar las frecuencias con Madrid y habilitarán nuevas conexiones directas con Talavera de la Reina, Extremadura y, en el futuro, Portugal. Los estudios realizados estiman un incremento de los viajeros de más de un 30%, pasando de 1,5 millones/año a 2 millones/año una vez se complete la nueva conexión de alta velocidad entre Madrid y Extremadura.
La solución se basa en el estudio informativo del tramo Madrid-Oropesa que define el despliegue de la infraestructura por la Comunidad de Madrid y la provincia de Toledo.
En este punto, cabe destacar que la propuesta recoge gran parte de las alegaciones presentadas por el Ayuntamiento de Toledo, como la mejora de la visibilidad y permeabilidad hacia la vega del Tajo, que se ha resuelto situando el tablero del viaducto 8 metros más bajo que el viaducto de mayor longitud de la ciudad, o la eliminación de las afectaciones a la zona urbanizable en el entorno del cementerio, que ha solventado con el planteamiento de un trazado alternativo alejado de las zonas urbanizables.
Puesta en valor de la estación histórica y mejorar la movilidad
Así, mientras se avanza en los trámites para aprobar el estudio informativo, Adif trabaja en el diseño para transformar la estación del centro del Toledo y sus accesos ferroviarios, aunando en un mismo espacio todos los servicios ferroviarios; fomenta la conexión con otros modos de transporte.
Además, la infraestructura ferroviaria discurre parcialmente cubierta en la zona del Salto del Caballo y el Parque del Crucero, donde se plantea una actuación de integración urbana que ordena los espacios e incorpora un nuevo aparcamiento junto al estadio.
Convertir la estación de Toledo en una estación pasante, frente a su configuración actual de estación término, permitirá maximizar su funcionalidad y duplicar su capacidad con la incorporación de nuevas vías.
El proyecto en el que trabaja Adif contempla dos vías pasantes, para los tráficos del corredor de Extremadura, y cuatro vías denominadas ‘mango’ (sin continuidad hacia Extremadura) destinadas a los servicios de proximidad entre Toledo y Madrid. También se plantea la construcción de un apeadero en Santa María de Benquerencia.
Así, gracias a esta propuesta se pueden establecer servicios de proximidad y elevada frecuencia Talavera – Toledo – Santa María de Benquerencia – Madrid Atocha – Madrid Chamartín a través de la nueva estación pasante de Atocha.
El histórico edificio, declarado Bien de Interés Cultural y ejemplo destacado del estilo neomudéjar, se verá enriquecido por una actuación que respetará y pondrá en valor sus valores arquitectónicos. Así, el vestíbulo y resto de dependencias interiores conservarán su estado original, al tiempo que se amplía la capacidad de las instalaciones mediante nuevos cuerpos que, conectados al principal, crearán un conjunto armónico, respetuoso e integrado.