Steven Everts, director del EU Institute For Security Studies, en Esade: “Solo si Europa es fuerte podrá ser libre”

En un momento de crecientes tensiones geopolíticas y desorden internacional, Europa se enfrenta a un dilema crítico: reforzar su resiliencia estratégica, aumentar su inversión en defensa y asumir un papel más activo en la construcción de un nuevo orden mundial, o quedar relegada en un escenario cada vez más inestable. Esta fue la principal conclusión de la sesión “Fortaleciendo la defensa y seguridad europea: industria y estrategia”, organizada por EsadeGeo, en la que líderes académicos, institucionales e industriales analizaron los desafíos que afronta el continente en un entorno global marcado por la incertidumbre, el auge del autoritarismo y la erosión del multilateralismo.

Durante su intervención, Steven Everts, director del Instituto de Estudios de Seguridad de la Unión Europea (EUISS), alertó que “la actual Administración Trump es muy diferente a la de 2016 y quiere hacerse con todos los centros de poder; además Trump es hoy más fuerte y, Europa, más vulnerable”, Everts urgió a los Estados miembros a dejar de lado discursos simbólicos y a invertir realmente en defensa, seguridad y autonomía estratégica: “Solo si somos fuertes podremos ser libres”, y pidió evitar tres graves errores: no permitir que Trump divida Europa, no olvidar que no está sola, y trabajar con todos aquellos países que puedan también verse afectados.

En su análisis, Everts delineó tres prioridades para la UE: reforzar el apoyo a Ucrania, preparar una defensa europea con menor dependencia de Estados Unidos y definir una política realista frente a China y proactiva para con el sur plural”. “Tenemos que actuar ahora, no podemos esperar a que las crisis nos desborden”, afirmó.

Integración y concienciación ciudadana

Desde el punto de vista industrial, Rebeca López Serrano, directora comercial responsable de asuntos de la OTAN en Indra, afirmó que “Europa está entrando en una nueva era para la que no está preparada”. “Somos un grupo de países sin una estructura militar integrada —explicó— y no basta con gastar más, sino mejor, de una forma coordinada y rápida, con objetivos a corto, medio y largo plazo”. López Serrano señaló el momento actual como una gran oportunidad para que la industria sea aliada estratégica en seguridad fortaleciendo la colaboración y la autonomía de la Unión Europea, haciéndola cada vez más resiliente, tanto en productos como en procesos.

La dimensión política y social de la sesión fue abordada por Monika Sus, profesora en la Polish Academy of Sciences y en la Hertie School, quien señaló que gracias a la actual situación “hemos consensuado dentro de Europa que la verdadera amenaza de la Unión Europea es Rusia”, y que “cada vez es más necesario conseguir una auténtica autonomía”, circunstancia que atribuye a la rápida reacción de la UE a la nueva Administración Trump. En materia de seguridad, insistió en la urgencia de construir una narrativa política que explique con transparencia a la ciudadanía europea el coste —y la necesidad— de reforzar la defensa común. “Sin apoyo ciudadano, todo este esfuerzo puede fracasar. La extrema derecha ya está capitalizando el discurso del coste del rearme— porque es costoso —pero una invasión es un coste mucho mayor”, advirtió.

La sesión “Fortaleciendo la defensa y seguridad europea: industria y estrategia” formó parte de la European Union Week 2025, una iniciativa en la que participan una decena de organizaciones académicas europeas con ponencias y debates sobre los dilemas y prioridades que enfrenta actualmente la UE. Durante su celebración, el moderador, Ángel Saz Carranza, director de EsadeGeo, destacó la importancia de integrar seguridad, industria y política en la respuesta europea ante las nuevas amenazas, mientras que Daniel Traça, director general de Esade, encargado de dar la bienvenida al acto, enmarcó la jornada en el contexto de transformación global que atraviesa Europa: “Vivimos en la era de los monstruos, pero también estamos llamados a ser los arquitectos de un nuevo orden basado en los valores europeos”. Las conclusiones corrieron a cargo de Javier Solana, presidente de EsadeGeo y ex alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, que recordó la importancia de la unidad europea, la defensa de los valores democráticos, la necesidad de crear “coaliciones de los dispuestos como ocurrió con la implantación del euro” para avanzar en temas de autonomía estratégica, y el compromiso multilateral como pilares esenciales para afrontar los retos globales.