- Los híbridos eléctricos (no enchufables) suponen en España la mayoría de las ventas de vehículos electrificados.
- Existen tres tipologías de híbridos eléctricos, siendo el sistema e-POWER del Nissan Qashqai un Híbrido Serie. Su funcionamiento es el que más se asemeja al de un vehículo 100% eléctrico.
- También es el sistema que mejor partido saca a la parte térmica, puesto que una de sus ventajas es que la hace funcionar en su rango de revoluciones más eficiente.
Barcelona – El concepto mecánico de Híbrido Eléctrico (HEV o Hybrid Electric Vehicle) es muy amplio. Bajo esa denominación, y en función de la disposición e interacción de sus componentes eléctricos y mecánicos, se encuadran tres tipos de tecnologías de propulsión diferentes, más allá de los híbridos enchufables (PHEV) e híbridos ligeros o microhíbridos (MHEV), tecnología esta última también presente en la gama Qashqai.
En esencia, se puede hablar de tres tipos de híbridos eléctricos, que son:
- Híbrido Paralelo
- Híbrido Serie
- Híbrido Serie-Paralelo
La ventaja competitiva de e-POWER
Los tres sistemas tienen en común varias cosas. Cuentan con un motor térmico (generalmente, de gasolina) y entre uno y tres motores eléctricos con capacidad para funcionar también en modo generador. Llevan etiqueta ECO, utilizan transmisiones automáticas (de diferentes tipos) y disponen de una batería de alta tensión con una capacidad que suele moverse en el entorno de los 1,5 kWh, aunque en Qashqai e-POWER alcanza 2,1 kWh.
El Híbrido Paralelo puede moverse tanto con el motor de gasolina como con el eléctrico, mientras que el Híbrido Serie-Paralelo es una mezcla entre el primero y el Híbrido Serie que equipa el Qashqai, siendo el único modelo de su segmento que lo emplea.
El sistema e-POWER de Qashqai (también disponible en X-Trail) es un Híbrido Serie y su particularidad reside en que no hay conexión mecánica entre el motor térmico y las ruedas, siendo siempre el eléctrico el que se encarga de la propulsión del vehículo. Por eso, su conducción se asemeja tanto a la de un vehículo eléctrico. Tampoco hay una caja de cambio o transmisión de ningún tipo asociada al motor térmico.
En el sistema Híbrido Serie e-POWER de Nissan, único en el mercado, la función del motor térmico es la de generar electricidad para la propulsión 100% eléctrica. Se llama Híbrido Serie porque la energía pasa, secuencialmente, de un dispositivo a otro: del combustible al motor térmico, de éste al generador eléctrico, que alimenta la batería o el inversor, y del inversor al motor eléctrico que acciona las ruedas a través de una caja de transferencia de una sola relación.
La gran ventaja competitiva de un Híbrido Serie como el Nissan Qashqai e-POWER es que el motor térmico siempre funciona en su rango de máxima eficiencia (y de manera más estable), puesto que no existe una relación directa entre su régimen de revoluciones y la velocidad a la que se desplaza el vehículo. Es la razón por la que su consumo de combustible es menor.
Qashqai e-POWER es el híbrido reinventado de Nissan
El Nissan Qashqai es el único crossover de su segmento que opta por el esquema Híbrido Serie; una tipología que, cuando se combina con un motor térmico de tecnología punta capaz de garantizar la máxima eficiencia alcanzable, es el más frugal, sencillo y fiable de las tres existentes. Cuenta con un motor eléctrico síncrono de imanes permanentes de 190 CV que es el único encargado de impulsar las ruedas.
Ese motor eléctrico se alimenta tanto de la batería como de la energía eléctrica generada, en tiempo real, por el propio motor de combustión interna. La batería, que ofrece 2,1 kWh de capacidad, se ubica bajo los asientos delanteros y sólo pesa 55 kg. Para garantizar su longevidad y nula degradación, su estado de carga siempre se mantiene entre en 25 y el 75%.
Gracias a que su único cometido es generar electricidad, este motor de gasolina siempre trabaja en regímenes estables y eficientes, comprendidos entre 1.500 y 4.800 rpm. Además, es el único propulsor del mercado provisto de un sistema capaz de variar su relación de compresión en función de las necesidades energéticas, algo que se logra mediante un sistema articulado intercalado entre bielas y cigüeñal. Esto le permite combinar rendimientos termodinámicos propios de una mecánica diésel junto con la densidad de potencia de un moderno tricilíndrico turboalimentado de inyección directa.
Además, Qashqai e-POWER cuenta con una modalidad de propulsión 100% eléctrica, activable mediante un botón situado en el túnel central y que resulta ideal para maniobrar y realizar pequeños recorridos en silencio y sin ninguna clase de emisiones. Aparte, como en los modelos Nissan 100% eléctricos, dispone de sistema e-Pedal, que incrementa la frenada regenerativa que obtenemos al soltar el acelerador (esto incrementa la eficiencia del vehículo, además del confort de conducción, reduciendo el número de intervenciones requeridas sobre el freno).
Qashqai MILD HYBRID: la etiqueta ECO más económica
La clara ventaja competitiva del sistema e-POWER no es óbice para que un 66% de los Nissan Qashqai que se venden en España correspondan a cualquiera de sus dos versiones MILD HYBRID (mHEV), que son microhíbridas o híbridas ligeras.
Ambas combinan un motor de cuatro cilindros 1.3 turbo de gasolina (una con 140 CV, la otra con 158 CV) y una pequeña máquina eléctrica, que puede hacer la función del alternador y del motor de arranque, integrada en una red de 12V. Esto permite a Qashqai MILD HYBRID portar la etiqueta ECO en su parabrisas, al igual que Qashqai e-POWER.
Esta pequeña máquina eléctrica, unida al cigüeñal del propulsor de gasolina mediante una correa, asiste al motor térmico en fases de aceleración y recupera energía en las deceleraciones, almacenándola en una batería de iones de litio para utilizarla con posterioridad.
Además, en Qashqai MILD HYBRID se puede elegir entre transmisión manual (en la versión de 140 CV) o automática de variador continuo (en la de 158 CV), en este último caso asociable también a un sistema de tracción total.