28.04.25
Los tratamientos antineoplásicos, destinados a impedir el desarrollo de células tumorales malignas, suelen formar parte de la lucha contra el cáncer. Al igual que cualquier otro fármaco, tienen efectos secundarios. Los antineoplásicos, en particular las antraciclinas, pueden generar efectos cardiotóxicos que comprometen la función del corazón. La detección temprana de estos y otros daños causados por la quimioterapia sigue siendo un desafío clínico. Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) y médicos del Hospital Universitario 12 de Octubre han explorado ahora el uso de imágenes de la actividad metabólica del corazón, adquiridas de forma rutinaria en el seguimiento de pacientes oncológicos, para el diagnóstico precoz de cardiotoxicidad y la prevención de la disfunción miocárdica.
La hipótesis de partida del estudio, parcialmente financiado por la Sociedad Española de Cardiología, es que el daño miocárdico incipiente puede detectarse más precozmente analizando los cambios en el metabolismo cardiaco. Bajo el liderazgo clínico de Héctor Bueno, cardiólogo del Hospital Universitario 12 de Octubre y del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), y Adolfo Gómez-Grande, médico del Servicio de Medicina Nuclear del citado hospital madrileño, se realizaron exploraciones basadas en imágenes [18F]FDG PET/CT antes, durante y después del tratamiento. A continuación, se confirmó mediante estudios ecocardiográficos la presencia de disfunción cardiaca relacionada con el tratamiento del cáncer para observar su correlación con los patrones de actividad metabólica miocárdica a lo largo de la terapia.
La plataforma CASSIA evalúa la actividad metabólica del corazón. Fuente: UPM
Investigadores del Grupo de Bioingeniería y Telemedicina (GBT) de la UPM, adscrito a la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Telecomunicación (ETSIT), y del Centro de Tecnología Biomédica (CTB) se encargaron de desarrollar, liderados por la profesora Patricia Sánchez, una plataforma para cuantificar los cambios en el metabolismo de las diversas regiones del músculo cardiaco durante la fase de tratamiento y recuperación. Para ello, usaron técnicas avanzadas de radiómica – método para extraer y analizar datos cuantitativos a partir de imágenes médicas mediante una serie de algoritmos -, que pueden describir patrones de homogeneidad o heterogeneidad de la actividad metabólica miocárdica. Los resultados del estudio con esta plataforma, denominada CASSIA, revelaron que existe una asociación entre la homogeneidad de la actividad metabólica y los patrones de captación más bajos en el grupo de pacientes que desarrollaron cardiotoxicidad.
Los responsables del estudio afirman que el análisis de los estudios PET/CT realizados rutinariamente permitirá identificar precozmente a aquellos pacientes con más riesgo de desarrollar daño cardiaco con la quimioterapia, lo que aumentará la seguridad de los tratamientos y la eficiencia en el uso de los recursos hospitalarios. Actualmente, esta línea de investigación continúa con el objetivo de aumentar las funcionalidades ofrecidas por CASSIA, expandir el estudio clínico y la aplicación de técnicas de inteligencia artificial para ayudar en la identificación temprana de pacientes susceptibles a la cardiotoxicidad.
PALOMINO-FERNÁNDEZ, D.; BUENO, H.; JIMÉNEZ-LÓPEZ-GUARCH, C.; MORENO, G.; SEIFFERT, A.P.; GÓMEZ, E.J.; GÓMEZ-GRANDE, A.; SÁNCHEZ-GONZÁLEZ, P. “Reduced Homogeneous Myocardial [18F]FDG Uptake in Routine PET/CT Studies as an Early Indicator of Chemotherapy-Induced Cardiotoxicity”. Appl. Sci. 2024, 14, 11653.