Los glaciares en la península donde se encuentra la base científica antártica Juan Carlos I han mantenido una considerable estabilidad en los últimos milenios

Los glaciares en la península donde se encuentra la base científica antártica Juan Carlos I han mantenido una considerable estabilidad en los últimos milenios

Noticia
|
Investigación
(10/12/2024)
Una investigación que lidera el investigador de la Universidad de Barcelona Marc Oliva, analiza la evolución de los glaciares en la península Hurd, en la Antártida, sede de la base científica española Juan Carlos I. Este estudio, publicado en la revista Quaternary Science Reviews, abarca desde hace más de 30.000 años hasta la actualidad, y muestra que los glaciares han sido bastante estables en los últimos milenios en este lugar polar.

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Investigación
10/12/2024
Una investigación que lidera el investigador de la Universidad de Barcelona Marc Oliva, analiza la evolución de los glaciares en la península Hurd, en la Antártida, sede de la base científica española Juan Carlos I. Este estudio, publicado en la revista Quaternary Science Reviews, abarca desde hace más de 30.000 años hasta la actualidad, y muestra que los glaciares han sido bastante estables en los últimos milenios en este lugar polar.

«Los glaciares en la península Hurd solo han variado unos cientos de metros en los últimos 4.000 años; al contrario que en otras zonas de las regiones polares, donde la retirada del hielo ha sido acelerada, en este sector se trata de un retroceso bastante relativo», explica Oliva. El investigador destaca que la investigación es especialmente interesante para la comunidad científica española, ya que estudia el territorio donde está ubicada la base Juan Carlos I. «Por tanto, los investigadores en esta base tendrán que tener en cuenta el calendario del retroceso de los glaciares que presenta este trabajo para contextualizar sus investigaciones sobre el suelo, la flora, la fauna o la historia del clima», señala.
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El estudio apunta a un adelgazamiento de la capa de hielo, probablemente antes del período conocido como el último máximo glacial, hace unos 30.000 años, y que el proceso de deshielo se aceleró entre hace unos 20.000 y 13.000 años. Después, el gorro de hielo de la península Hurd podría haberse mantenido relativamente estable, con oscilaciones menores de las masas de hielo, hasta mediados de Holoceno, cuando se produjeron avances neoglaciales (entre unos 4.000 y 4.500 años atrás). El último de estos avances, así como la estabilización posterior, ocurrió durante el período conocido como pequeña edad de hielo, a finales del siglo XIX y principios del siglo XX.