Las profesoras de la Universidad Pública de Navarra (UPNA) e investigadoras del instituto de Investigación Social Avanzada I-COMMUNITAS Eliana Alemán Salcedo, Lohitzune Zuloaga Lojo y Elisa Sierra Hernáiz han presentado los resultados de su investigación “Liderazgo de las mujeres en y a través de los sindicatos de la Comunidad Autónoma de Euskadi: facilitadores, barreras y desafíos”. El proyecto está financiado por Emakunde (Instituto Vasco de la Mujer) a través de su convocatoria anual (2022) de proyectos de investigación sobre igualdad.
El equipo de investigadoras, en la UPNA, en una imagen de archivo. De izda. a dcha., Lohitzune Zuloaga, Eliana Alemán y Elisa Sierra.
Para realizar su investigación, las autoras han entrevistado a un centenar de mujeres con distintas responsabilidades dentro de los cuatro sindicatos con mayor representatividad en Euskadi: Eusko Langileen Alkartasuna-Solidaridad de los Trabajadores Vascos (ELA), Langile Abertzaleen Batzordeak (LAB), Comisiones Obreras (CC.OO.) y Unión General de Trabajadores y Trabajadoras (UGT). Según indican las investigadoras, estas organizaciones se han feminizado progresivamente y actualmente, en todas ellas existe paridad o se mantienen en la horquilla entre el 60% 40% de representatividad de cada uno de los sexos. Como explican las investigadoras, la mayor presencia de mujeres se percibe como positiva por parte de las participantes en el estudio, puesto que aporta diversidad y variedad de referentes.
“De los testimonios recogidos también se constata que las lideresas sindicales se han empoderado, reconociendo la dimensión individual, pero sobre todo, colectiva, del empoderamiento. No obstante, el empoderamiento no es un proceso espontáneo ni es posible empoderar a otras personas, pero los sindicatos si pueden crear condiciones para que se produzca ese proceso. Al mismo tiempo, se ha subrayado que la retroalimentación entre sindicatos y movimientos feministas es sin duda un valor a seguir construyendo”, explican las investigadoras. En conclusión, recomiendan a los sindicatos que se potencie en liderazgo de las mujeres en sus organizaciones. “Esto implica superar los modelos hegemónicos de liderazgo y activismo, de entender el poder, de las formas de hacer y organizarse”, concluyen.