Se trata de una prueba piloto de préstamo de bicicletas para el estudiantado de los campus tarraconenses; se pretende consolidar y extender el servicio a otros campus a partir del próximo curso
La Oficina de Igualdad y Compromiso Social de la Universidad Rovira i Virgili ha entregado las primeras bicicletas en préstamo «Muévete en verde», una iniciativa para mejorar la movilidad del estudiantado en sus trayectos de su casa a los campus. Se trata de una prueba piloto para los estudiantes que residen en Tarragona y estudian en alguno de los campus de la ciudad —Catalunya y Sescelades— que cuenta con una flota de doce bicicletas plegables.
La movilidad es uno de los aspectos más importantes para la comunidad universitaria y afecta significativamente a su calidad de vida. Por este motivo, la URV quiere facilitar los desplazamientos urbanos con opciones de transporte sostenibles y saludables. «Se trata de una iniciativa con el objetivo de reducir la emisión de gases de efecto invernadero de la comunidad», explica Antonio de la Torre, técnico de medio ambiente y sostenibilidad.
Tras un periodo de inscripción, las bicicletas han sido asignadas a los estudiantes de grado, máster y doctorado que las solicitaron, según criterios de proximidad entre el campus y la dirección de residencia y la existencia de vías adecuadas para desplazarse. Los usuarios son responsables del mantenimiento y la seguridad de las bicicletas, que deberán guardar en su casa durante la noche. Una fianza de 75 euros, abonada por los usuarios antes de la entrega, servirá de garantía para cubrir posibles desperfectos o robos de los vehículos.
Una bicicleta «superligera»
Las bicicletas «Mou-te en verd» son nuevas y disponen de todos los elementos de seguridad necesarios para transitar por la ciudad: luz delantera y piloto rojo trasero, paneles reflectantes en llantas y pedales y un timbre al manillar. Después de dar una vuelta de prueba, Dahiana Peñuela, estudiante de doctorado, está contenta de haber entrado en el programa: «Tarragona es una ciudad pequeña, pero tengo que caminar cuarenta minutos de casa al campus; una bicicleta me va a solucionar la vida. Además, ¡es superligera!». Pensando en la comodidad del usuario y en la seguridad de las bicicletas, se ha escogido un modelo plegable, que facilita el almacenamiento del vehículo en el domicilio. No obstante, la bicicleta es robusta y dispone de asiento y manillar regulables en altura.
Este programa de préstamo de bicicletas que impulsa la Oficina de Compromiso Social es, hoy por hoy, una prueba piloto. Si los resultados de la experiencia son positivos, se planteará un plan para consolidar el servicio y expandirlo a otras localidades y campus de la URV a partir del próximo curso, con el objetivo de reducir la huella de carbono de toda la comunidad y fomentar un estilo de vida más activo y saludable.
