La Universitat de València ha inaugurado este lunes 3 de marzo a mediodía en el recientemente inaugurado Espai Vives, la exposición ‘Habilitar el Vives. Memoria de un espacio universitario’, una muestra que plantea la recuperación de la historia la memoria del edificio de Javier Goerlich, actualmente Espai Vives, un icono de la arquitectura racionalista valenciana, que está reconocido como Bien de Interés Local; la vida de sus residentes y las actividades culturales a partir de documentos audiovisuales rescatados de archivos institucionales y álbumes familiares.
La inauguración ha contado con las intervenciones de la rectora, Maria Vicenta Mestre; la vicerrectora de Cultura y Sociedad, Ester Alba; el comisario de la exposición, Paco de la Torre; el comisario adjunto y director del Colegio Mayor Lluís Vives (1998-2007), Lluís Puig; el último director del centro, José María Goerlich y el artista José María Yturralde.
La rectora de la UV ha destacado la importancia de esta exposición que recupera la memoria del que fuera colegio mayor hasta 2012. “El paso por la universidad no es solo defender un currículo académico, sino formarse en valores y en principios entre los que se encuentran: la igualdad, el respeto, la solidaridad o la inclusión, y más en un tiempo como el que vivimos. Y habitar un colegio mayor universitario aporta ese sentido de convivencia y de formar a la ciudadanía”. En este sentido, tanto esta exposición como el uso del recientemente inaugurado Espai Vives pretenden conservar la esencia del que fuera colegio mayor, como foco de difusión cultural y de innovación, y está pensado como un espacio para el estudiantado de una universidad pública y abierto a la sociedad.
Especialmente emotiva ha sido la intervención de Lluís Puig, que fue director de este espacio durante casi una década y en sus palabras se ha referido el vínculo que le liga al colegio, especialmente personal: “Viví aquí 9 años e hice de este lugar mi casa, por eso, la exposición Habitar el Vives es como una invitación a entrar en casa,”. Del CM. Lluís Vives ha puntualizado algunas de sus singularidades: fue el primer colegio mayor universitario mixto de toda España y la larga historia de difusión de la cultura que ha realizado.
El comisario de la exposición ha explicado que la muestra se estructura en tres secciones, en las que se muestran una gran cantidad de carteles, invitaciones, fotografías y videos de los recitales de poesía, proyecciones de cine, o conciertos de música clásica, rock, pop o electrónica celebrados en el recinto. También se incluyen una selección de planos de los proyectos arquitectónicos, documentación histórica original, objetos de diseño y la maqueta del edificio.
En la primera sección, dedicada al edificio ‘Icono racionalista’, se aborda su valor arquitectónico, en el contexto histórico de la ciudad de València. El edificio, proyectado por Javier Goerlich, formó parte de un proyecto urbanístico de primer nivel en la primera mitad del siglo XX: la Ciudad Universitaria, que ayudó a extender la urbanización de la capital valenciana hacia levante, siguiendo el Paseo Valencia al Mar, y contribuyó a conformar un barrio de funciones directivas sin el cual es difícil entender la estructura funcional actual de la ciudad. En esta sección, se incluye la acuarela original de 1945 junto a los planos, donde se incluye el Proyecto de División de 1953 para albergar los colegios mayores Alejandro Salazar y Luis Vives. También se exponen las placas de vidrio del primer reportaje fotográfico realizado al edificio c. 1954, junto a una selección de fotografías de autores como Luis Vidal, Juan Peiró o Mayte Piera.
En la segunda sección, ‘Habitar el Vives’ se recogen historias de los colegiales, trabajadores y de la gente que habitaba este espacio tan singular, ‘la Comunidad Universitaria’. Se incluyen centenares de fotografías procedentes de álbumes familiares y recuerdos personales, como los botones de plata y oro que otorgaba el Colegio, junto a sus primeros estatutos democráticos o el primer número de la revista ‘Vivir el Vives’.
Por último, la tercera sección se centra en destacar el compromiso con la cultura y la sociedad que siempre tuvo esta institución. Desde la llegada de la democracia, en los años 80 se produce una apertura del colegio a la sociedad con la organización de jornadas temáticas y actividades culturales en el marco de la Transición y por el colegio intervinieron personalidades como José Luis Aranguren, Manuel Boix, Joan Lerma… Con la apertura del Auditorio en la antigua Capilla en 1999, se inicia un periodo de gran actividad centrada en la programación musical y los ciclos de cine, lo que hizo que se convirtiera en un referente en el ámbito valenciano, con actuaciones internacionales como Antony and the Johnsons o grupos independientes de la escena española como La Habitación Roja.
La exposición reúne cuatro audiovisuales, donde se abordan los resultados de la investigación de manera temática. Cabe destacar el documental que incluye 27 testimonios de colegiales del centro, entre los que destacan el crítico de arte y catedrático de Estética Román de la Calle; el profesor emérito y Medalla por la UV, Manuel Costa o José María Yturralde (Premio Nacional de Artes Plásticas 2020), artista y amigo personal del entonces director José María López Piñero, que frecuentó el colegio en los años sesenta y para el que realizó dos obras de gran formato, uno de sus primeros encargos profesionales que se recuperan para la exposición.
La exposición, que podrá visitarse hasta el próximo 10 de julio, está organizada por el Centre Cultural La Nau y el Vicerrectorado de Cultura y Sociedad de la Universitat de València y cuenta con la colaboración de la Generalitat Valenciana y el TAU (Taller Audiovisuals de la Universitat València).
Historia del centro
Durante la segunda República, la Universitat de València decidió crear una Residencia de Estudiantes, concebida como la que había fundado en Madrid la Junta para Ampliación de Estudios siguiendo las ideas de la Institución Libre de Enseñanza. La sublevación contra la República, sin embargo, dejó en suspenso el proyecto y la victoria de los sublevados en la guerra civil conllevó la substitución del modelo republicano por el modelo tradicional de Colegio Mayor en que encuadrar a los estudiantes universitarios.
El arquitecto Javier Goerlich fue el encargado de elaborar un proyecto de edificio para albergar tanto la idea inicial republicana, presentado en 1935, como los que le sucedieron, que, respondiendo a las ideas de los vencedores, condujeron a la inauguración en 1954 del Colegio Mayor Luis Vives de la Universidad de Valencia en el ala derecha, y, unos años después, del Colegio Mayor Alejandro Salazar del Sindicato Español Universitario en el ala izquierda.
Partiendo de la forma y función arquitectónica de Goerlich –diseño racionalista original revisado a lo largo de su historia, desde la fachada a las estancias, dormitorios, salones, comedor, biblioteca o cafetería– construimos pues la memoria del edificio a través de las vivencias y recuerdos de quienes lo habitaron a lo largo de seis décadas. Un pasado necesario, que define su identidad y alumbra su futuro. Su memoria, más allá de fechas, documentos o imágenes, está conformada de manera colectiva por el recuerdo y la experiencia de sus moradores, una suma de relatos íntimos y colectivos que acontecieron en las estancias de este edificio. Pero también, de las actividades culturales que han conformado su concepción como lugar abierto a la ciudad desde sus orígenes, acogiendo conferencias, exposiciones, tertulias, homenajes, jornadas, cine fórum o conciertos.
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