La Universidad de La Laguna conmemoró el Día de Europa con un acto en el que se abordó el impacto de la inteligencia artificial en el contexto normativo y social al que se enfrenta hoy la UE. El evento, celebrado este viernes 9 de mayo en el Aula Magna del Aulario General César Manrique y organizado por el Centro de Documentación Europea de la universidad, contó con diferentes personas expertas en computación, derecho y filosofía que ahondaron en los retos y las oportunidades que plantea esta tecnología.

Durante la sesión se impartieron tres ponencias que ofrecieron un enfoque multidisciplinar sobre la IA desde varias perspectivas académicas, con el objeto de profundizar en los desafíos normativos, éticos y operativos, moderadas por Ruth Martinón, directora académica del Centro de Documentación Europea.

Inmaculada González, vicerrectora de Internacionalización y Cooperación, inauguró la jornada, destacando la enorme relevancia que presenta esta herramienta como elemento transformador, sobre todo, en cuanto a la cooperación internacional y sus implicaciones sociales y culturales. “La Unión Europea es un marco privilegiado para desarrollar una tecnología humanista centrada en las personas, en la sostenibilidad y los derechos fundamentales”, señaló, especialmente por las tendencias internacionales que amenazan la democracia, el diálogo y la paz. En este sentido, recalcó el papel relevante de la Universidad de La Laguna como agente activo en este desafío, promoviendo una ciudadanía crítica y consciente de las implicaciones éticas y sociales.

Imagen de los participantes: Andrea Padrón, Teresa García-Berrio, Ruth Martión y Francisco Almeida.

A continuación, Dulce María Cairós, decana de la Facultad de Derecho, recordó que este año es el septuagésimo quinto aniversario de la Declaración Schuman, origen del proyecto europeo. En un contexto de geopolítica global complejo y marcado por el avance tecnológico, apeló a la necesidad de reforzar el pilar social europeo y mantener su papel como “faro moral del mundo”. Siguiendo las palabras fundacionales de Schuman, reivindicó la vigencia de su espíritu en el presente y futuro del proyecto europeo.

Francisco Almeida, catedrático de Lenguajes y Sistemas Informáticos de la Universidad de La Laguna, se centró en las oportunidades y retos de la IA desde el punto de vista computacional, analizando las consecuencias inciertas que presenta en términos de desarrollo seguro y eficiente. Almeida puso en evidencia el coste energético de la computación como uno de los grandes problemas: “Solo para entrenar un modelo como ChatGPT 4 se utilizó cien veces el consumo energético de Santa Cruz de Tenerife”.

Teresa García-Berrio, profesora titular de Filosofía del Derecho de la Universidad Complutense de Madrid, también participó en la sesión para disertar acerca de los derechos fundamentales en la era digital y los riesgos emergentes en el enfoque europeo de la IA. La experta explicó que uno de los grandes retos para crear un marco legislativo eficaz es la carencia de conciencia ética de la inteligencia artificial para garantizar un entorno tecnológico confiable que respete los derechos fundamentales de la Unión Europea. En general, subrayó la importancia de preservar los derechos fundamentales, como la privacidad y la no discriminación.

Por su parte, Andrea Padrón Villalba, profesora ayudante de Derecho Mercantil de la Universidad de La Laguna, se preguntó si un robot puede ser sujeto de derecho para la Unión Europea,

Francisco Almeida, catedrático de la ULL, durante su intervención.

abordando los dilemas jurídicos en torno a la posibilidad de reconocer una personalidad jurídica a estos sistemas. Esto implicaría una generación de derechos específicos para las inteligencias artificiales, por ejemplo, en caso de accidente o de si una persona sufre un daño derivado de su uso. Sin embargo, esta es una cuestión aún emergente en el debate europeo, ante el panorama incierto sobre el alcance futuro de esta tecnología.

El acto concluyó con una ronda de preguntas abierta al público, seguida de una clausura institucional, que ofrecieron un espacio distendido para el intercambio de ideas entre asistentes y ponentes.