Hoy, viernes, ha tenido lugar en el edificio DEMA de Barakaldo la presentación de un nuevo cebo de entrenamiento canino llamado “Hilotz” formulado por Auziker, una empresa especializada en la investigación y desarrollo de dispositivos para el entrenamiento de unidades caninas olfateadoras en el ámbito forense, salud y biodetección. “Hilotz” es el primer cebo diseñado para el entrenamiento en la detección de cadáveres con menos de 24 horas de intervalo post mortem, tratándose de un hito que no habría sido posible sin la implicación activa de la Unidad Canina de la Ertzaintza y su compromiso con la mejora continua de las herramientas de detección.
En el evento han participado todas las personas implicadas en su desarrollo y usuarios potenciales del mismo, habiéndose llevado a cabo en el lugar un ensayo práctico en directo en el que han participado perros de rescate de la Unidad Canina de la Ertzaintza.
La estrecha relación entre Auziker y la Unidad Canina de la Ertzaintza se remonta a 2017, cuando fueron precisamente sus agentes quienes impulsaron el desarrollo de los primeros cebos de entrenamiento de la empresa. Fruto de esa colaboración constante, la Ertzaintza planteó en 2023 un nuevo reto técnico: la dificultad de entrenar a los perros de detección para localizar cadáveres en fases muy tempranas de descomposición.
Durante las primeras horas tras el fallecimiento, los cuerpos desprenden compuestos volátiles muy diferentes a los que se generan en etapas más avanzadas de putrefacción. Sin embargo, la imposibilidad de entrenar con cadáveres reales en ese intervalo tan corto obliga a utilizar materiales alternativos (como cebos sintéticos o tejidos de cerdo), que no reproducen con precisión el olor objetivo y pueden generar falsos positivos.
En respuesta a esta necesidad, Auziker recogió el reto en septiembre de 2023 y comenzó el desarrollo de un nuevo cebo: Hilotz. Un cebo de entrenamiento que reproduce los compuestos volátiles clave presentes en cadáveres durante las primeras 24 horas post mortem. Su objetivo: ofrecer una herramienta segura, ética, universal y libre de los problemas logísticos y legales asociados al uso de restos humanos reales.
Este desarrollo ha sido posible gracias a la colaboración científica del Instituto Vasco de Medicina Legal y de la Universidad del País Vasco (EHU), en el marco del programa “Harrotu” de Auziker, a través de dos Trabajos Fin de Máster del Máster en Análisis Forense. En ellos se diseñaron y ejecutaron tanto la metodología de muestreo y análisis de compuestos en cadáveres reales como el posterior tratamiento estadístico de los datos. A partir de esta información, el equipo de síntesis de Auziker logró desarrollar los prototipos del cebo “Hilotz”.
La validación de los diferentes prototipos ha sido clave, y para ello la Unidad Canina de la Ertzaintza ha colaborado desde enero de 2025 con sus perros de rescate, realizando pruebas de búsqueda libre. Gracias a estos ensayos, el equipo ha podido afinar la formulación final del cebo sintético, obteniendo resultados muy positivos en cuanto a selectividad y especificidad.