La Escuela de Doctorado y Estudios de Posgrado de la Universidad de La Laguna ha organizado hoy, martes 26 de noviembre, unas jornadas de bienvenida al alumnado que comienza su doctorado este curso 2024-25. Han acudido al encuentro celebrado en el Aula Magna Blas Cabrera Felipe de la Facultad de Ciencias alrededor de 70 personas para recibir orientación acerca de cuestiones administrativas y formativas relacionadas con las primeras etapas de elaboración de sus tesis.

El rector de la institución, Francisco García, resaltó la importancia del doctorado porque supone el rasgo distintivo de la universidad pública. “Apostar por la investigación y generar conocimiento, no solo difundirlo, es lo que nos distingue de otras instituciones. Va más allá de la frontera del conocimiento para aportar valor a la sociedad. Y en Canarias, el 100% de las tesis doctorales se generan en sus dos universidade públicas”. Señaló como retos de cara al futuro mejorar la internacionalización e impulsar doctorados industriales que atiendan de manera más directa las demandas del sector productivo.

García se dirigió a quienes inician sus estudios de doctorado para felicitarlos por su decisión, pero también advertirles que lo hacen en unos momentos especialmente complicados para la universidad y para la ciencia. “El rigor académico tiene que competir en el escenario mediático con los bulos. Si el conocimiento científico siempre ha sido importante, ahora lo es aún más”. Por ello, concluyó con un mensaje que apeló directamente a su responsabilidad: “Lo que van a hacer es muy importante no solo para ustedes, sino para esta universidad y la sociedad en general. Trabajen con rigor, porque en ello va buena parte de nuestro futuro”.

Gustavo Marrero y Francisco García.

Gustavo Marrero y Francisco García.

Por su parte, el director de la Escuela de Doctorado y Estudios de Posgrado, Gustavo Marrero, explicó que el doctorado se divide en cuatro fases fundamentales: el inicio durante el primer año, que es el momento en el que se hallaba la audiencia de este acto; el desarrollo de los trabajos: el remate y revisión final, “que es bastante tedioso”; y la lectura, que a su vez abre una nueva etapa posdoctoral.

Detalló que esa primera fase es muy importante porque es en la que se definen los objetivos, el plan de trabajo, se elige el director y, finalmente, se determina el plan de formación. Es también la etapa en la que hay que leer más, asistir a seminarios como oyentes, e intenten hablar todo lo que pueden con doctorandos de último año, una experiencia que Marrero recomendó a los y las jóvenes que inician el doctorado.

La sesión prosiguió con una ronda de intervenciones muy cortas, de aproximadamente diez minutos cada una, en la que diferentes personas explicaron aspectos muy concretos del doctorado. La subdirectora de Doctorado de la escuela organizadora, Sara Darias, se centró en explicar las características de tres tipos especiales de doctorado y las condiciones para realizar cada uno de ellos: doctorado con mención internacional, doctorado con cotutela internacional y doctorado industrial.

Por su parte, la subdirectora de Calidad y Formación, Etelvina de las Casas, les adelantó cuáles eran los cursos del plan de formación que oferta la universidad para nuevos doctorandos, que a diferencia del plan de cada uno de los programas de doctorado, es de carácter opcional, pero muy recomendable porque incluye instrucción sobre habilidades que serán necesarias durante la elaboración de la tesis, como es el uso de determinadas herramientas informáticas, el aprovechamiento de manera óptima de los recursos que ofrece la biblioteca, e incluso disponer de herramientas psicológicas para sobreponerse a situaciones de estrés y pensamientos intrusivos.

Por su parte, el coordinador de Movilidad Internacional de la escuela, Alejandro Armas, dio algunas nociones sobre la movilidad en el ámbito del Programa Erasmus+. Seguidamente, también hubo presentaciones sobre diferentes servicios institucionales que pueden resultar de gran ayuda al colectivo de doctorandos durante sus labores investigadoras: Servicio de Información y Orientación, recursos TIC, Servicio de Biblioteca y espacios de encuentro y apoyo.

Premios extraordinarios

La sesión terminó con la entrega de los premios extraordinarios de doctorado correspondientes a los cursos 2021-22 y 2022-23, cuyas resoluciones se habían postergado por diferentes razones; de hecho, los del segundo curso aún no han sido refrendados por el Consejo de Gobierno, pero fueron anunciados igualmente porque dicho trámite es inminente.

Así, en el curso 2021-22, las personas ganadoras fueron, en la rama de Arquitectura e Ingeniería, Ricardo Oliva García; en Arte y Humanidades, Alberto Ismael García Aguilar, Francisco de Borja Moreno Candel y Ricardo Marcos Fajardo Hernández; en Ciencias de la Salud, Esther Herrera Luis, Ernesto Martín Núñez, David González Martín, Martín Antúnez García, Ana María Perdomo Ramírez y Luis García Hernández -Abad; en Ciencias Sociales y Jurídicas, Sebastián Martín Gómez, Oswaldo Ledesma González y Noelia Cruz Pérez; y en Ciencias, Valeriia Liakh, Borja Toledo Padrón, Adrián Gutiérrez Serpa y Julien Christophe Piquet.

En cuanto al curso 2022-23, las personas premiadas han sido, en Artes y Humanidades, Zuleyma Guillén González, Jared Carballo Pérez y Narés García Rivero; en Ingeniería y Arquitectura, Elisabet Segredo Morales; en Ciencias de la Salud, Javier Pérez García, Carlos Javier Betencourth Estrella, Romina Cabrera Rodríguez y Génesis Palacio Cortés; en Ciencias Sociales y Jurídicas, Laura Rodríguez Gómez, Anthea Gara Santos Álvarez, Lara Carrascosa Puertas y Laura Ionita Ionita; y en Ciencias, Jorge Otero Santos, Sergio Díaz Coello, Priscila López Rojas y Manuel Alejandro Marrero Arteaga.