La Universidad de La Laguna celebra del 20 al 28 de enero de 2025 las XXI Jornadas de “Acércate a la Química”, una actividad que se ha consolidado como referente de divulgación científica en la institución académica. 452 estudiantes de bachillerato procedentes de Tenerife, Gran Canaria, La Palma, Fuerteventura y Lanzarote, acompañados por 50 docentes, visitan la Sección de Química de la Facultad de Ciencias para participar en un programa de prácticas experimentales diseñadas para despertar su interés por esta ciencia y mostrarles su potencial.
La actividad busca incentivar las vocaciones por las llamadas titulaciones STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) entre el alunando más joven y ofrecerle una primera toma de contacto con el entorno universitario, acercándolos a su posible futuro académico.
Cada día, el alumnado realizará en los laboratorios de la Sección de Química —los mismos que utiliza el actual alumnado universitario—, diferentes prácticas bajo la supervisión de profesorado perteneciente a cinco áreas de conocimiento de Química. Además, estarán directamente atendidos por estudiantes del doctorado en Química, del Máster en Formación del Profesorado y del cuarto curso del Grado en Química matriculados en la asignatura Prácticas Externas.
Las prácticas abarcan áreas tan diversas como la Química Orgánica, Inorgánica, Analítica, Física e Ingeniería Química. Entre los experimentos destacados se encuentran la preparación de una aspirina, la creación de nylon, reacciones oscilantes, la producción de “lumbre de colores” y la construcción de pilas ecológicas utilizando papas, limones y naranjas.
Experiencia educativa inmersiva
Yapci Remedios, investigador predoctoral y encargado de las prácticas de Química Física, explicó cómo estas actividades logran captar la atención del alumnado. “Lo que hacemos es guiar a los estudiantes para que ellos mismos realicen los experimentos. Por ejemplo, en la reacción del magnesio con ácido clorhídrico, añadimos colorantes para que puedan observar cómo se genera presión y cómo el magnesio se oxida formando cloruro de magnesio. Al manipular directamente los materiales, no solo entienden los conceptos de oxidación y reducción, sino que se sienten parte del proceso científico”, señaló.
Además, destacó el impacto visual de estas prácticas: “Usamos colorantes vivos, como amarillo o rojo, para que los cambios químicos sean más llamativos. Este enfoque no solo refuerza el aprendizaje, sino que también hace que los estudiantes se sientan más motivados a explorar la Química”.