La vicerrectora de Cultura y Sociedad recibe de manos de Antonio Serrano un amplio legado que la Universidad de Almería procederá a digitalizar y a poner a disposición de la docencia y la investigación, al tiempo que anuncia la continuidad del Ciclo Académico de las Jornadas. Los carteles de todas las ediciones se pueden ver en una exposición estos días en el Edificio de Gobierno.
La UAL permanecerá como uno de los principales apoyos de las Jornadas de Teatro del Siglo de Oro, siendo a partir de ahora, además, custodia de toda la documentación que se ha generado a lo largo de sus 40 años de historia. En la misma hay un total de 54 carpetas y archivadores que contienen actas, memorias, programas, cartas, fotografías y carteles. Estos últimos, precisamente, han sido en gran medida los protagonistas de la cesión por parte de la Asociación Cultural Jornadas de Teatro del Siglo de Oro, puesto que se ha escenificado en un acto realizado en medio de una exposición que recoge todos ellos y que ha sido inaugurada al mismo tiempo. Puede visitarse en la Sala de Exposiciones del Edificio de Gobierno y después en la Biblioteca.
Han explicado y valorado el acuerdo María del Mar Ruiz, vicerrectora de Cultura y Sociedad, y Antonio Serrano, presidente de la asociación, mostrando el agradecimiento mutuo de ambas partes. Ruiz lo ha expresado como “un honor” y también como una prueba más del “compromiso de nuestra universidad con la preservación y difusión del patrimonio cultural”. Respecto al material recibido, es un “legado” que “representa la memoria del compromiso con el teatro del Siglo de Oro de la sociedad almeriense”. Se ha referido igualmente al lugar elegido para esta presentación, “un espacio expositivo para poder visibilizar a través de los carteles de las 40 ediciones del Festival toda esa trayectoria y la apuesta” a la que antes se ha referido.
Ha anunciado que ya se está digitalizado todo el “conjunto documental”, que llega hasta la Universidad de Almería “por la visión y la generosidad de Antonio Serrano”. En ese sentido, ha puesto en valor que “con este gesto no solo enriquece nuestros recursos históricos, sino que también abre nuevas oportunidades para la investigación y el estudio”, textualmente por su parte. De hecho, ha definido los fondos como “una herramienta fundamental” en torno a la preservación y difusión de las Jornadas de Teatro del Siglo de Oro, “plataforma en la que todos estos años se han dado cita los mejores montajes” y también “músicos, académicos, directores y actores”. María del Mar Ruiz ha subrayado que la UAL dará continuidad al Ciclo Académico, dirigido por María Pérez y que va a componerse de nuevo con “homenajes, conferencias, mesas redondas, coloquios y escenificaciones teatrales”.
Antonio Serrano, arropado por varios integrantes de la asociación que preside, ha reconocido que “es el final de un proceso que lo esperábamos, que lo deseábamos y que creíamos que era de justicia”, destacando que las personas asistentes al acto “es gente con la que empezamos esta aventura insensata y que luego terminó por ser una aventura creo que maravillosa”. Ha repasado justamente esos orígenes “en la Universidad Laboral, instituto Sol de Portocarrero”, cuando “comprendimos y vimos que el teatro del Siglo de Oro no solamente había que leerlo, sino que había que verlo, y que teníamos que hacer un esfuerzo por llevarlo a nuestros alumnos”. De ahí a que Almería haya sido un referente internacional en esta materia ha habido la involucración de muchas personas, varias de las cuales han dirigido festivales y escuelas de gran prestigio.
Se ha mostrado reivindicativo al hablar de que “ha sido una labor hermosa, pero me gustaría que en las instituciones de Almería se volviera a tener el compromiso que tuvieron en un momento y que hoy ha decaído muchísimo, al menos económicamente”. Respecto a la UAL, todo lo contrario: “Para nosotros ha sido imprescindible, se ha transformado en una pieza clave, hasta el punto de que sin la Universidad de Almería no existirían estas jornadas con una parte de representaciones y con una parte académica”. Por ello, ha insistido en la relevancia de la cesión documental: “Llegó el momento que pensamos dónde sería el hábitat natural de toda esta documentación, y, sin duda ninguna, era la UAL”. La encomienda es clara: “Hay dos tipos de gestiones, el cuidado y catalogación, y el que esté a disposición para nuevas investigaciones, transmitiendo a los alumnos la importancia del material que aquí está”.