La Junta de Andalucía refuerza su apuesta por la economía circular con una Estrategia pionera y una plataforma de simbiosis industrial

La consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Catalina García, ha comparecido ante el Pleno del Parlamento andaluz para informar de las medidas que está desarrollando el Gobierno andaluz en materia de gestión y tratamiento de residuos. En su intervención, ha centrado su mensaje en el “firme compromiso con la sostenibilidad” que guía todas las políticas de la Junta y ha puesto el foco en los avances más recientes en economía circular.

Entre ellos, ha destacado la aprobación, el pasado mes de febrero, de la formulación de la Estrategia Andaluza para la Economía Circular. “Su objetivo principal es promover un uso eficiente de los recursos y minimizar la generación de residuos”, ha afirmado. Esta Estrategia incorporará como una de sus grandes novedades una plataforma de simbiosis industrial para facilitar el intercambio de recursos entre empresas, centros de investigación y administraciones, y fomentar así procesos más sostenibles. “De este modo, puede dejar de ser residuo para su uso en una actividad o proceso industrial, asegurando la protección de la salud de las personas y el medio ambiente”, ha señalado.

Catalina García ha remarcado que la Consejería apuesta por un nuevo enfoque donde los residuos de unas industrias se conviertan en recursos para otras, promoviendo una economía circular real y efectiva en Andalucía. “La colaboración público-privada será clave para desarrollar soluciones tecnológicas que nos permitan transformar nuestros residuos en recursos valiosos”, ha subrayado.

En este camino hacia la circularidad, la consejera ha resaltado la participación de Andalucía en el proyecto europeo ‘Interreg Europe Circular Minds’, del que la comunidad autónoma es socia desde abril de 2024. “La idea principal es incluir, en mayor número y calidad, criterios de economía circular en los pliegos que conforman las licitaciones públicas”, ha explicado.

Al hilo de esto último, ha detallado que este programa permite a Andalucía intercambiar buenas prácticas con regiones de países como Países Bajos, Finlandia, Portugal o Suecia, con el objetivo de mejorar la implantación de la economía circular en la contratación pública. “En Andalucía se están llevando a cabo reuniones con distintas entidades locales en las que se están aportando estas buenas prácticas recibidas”, ha dicho.

Además, ha puesto en valor la herramienta desarrollada por la Junta para acompañar a los ayuntamientos en este proceso: “Hemos publicado una Guía de Apoyo a los Municipios para la Economía Circular, que les servirá de ayuda para cumplir con la obligación de tener planes municipales de economía circular”. Una iniciativa que, como ha recordado, es especialmente relevante dado que estos planes son obligatorios para los municipios de más de 5.000 habitantes, según la Ley andaluza de Economía Circular.

Más de 166 millones para apoyar a las entidades locales

En esta línea, ha defendido que “los ayuntamientos tienen una responsabilidad clave en la gestión de residuos, pero sería injusto cargar exclusivamente sobre ellos el peso de esta transición”, remarcando el respaldo económico que ofrece la Junta para su implantación que asciende a más de 166 millones de euros para la implantación de la recogida y tratamiento efectivo de los residuos municipales.

Entre las actuaciones más destacadas puestas en marcha desde 2019, la consejera ha citado el Plan de Puntos Limpios de Andalucía, con una inversión de siete millones de euros para 12 infraestructuras de este tipo, que ya ha permitido adjudicar obras en municipios como Camas, Chipiona, Bormujos o Jódar. A esto se suma el Plan de Estaciones de Transferencia para Biorresiduos, con cuatro millones, y diversas líneas de ayuda para la recogida separada de biorresiduos por valor de 45 millones de euros, a lo que añadirá otras ayudas por valor de 8 millones.

También ha explicado las ayudas destinadas a la adquisición de vehículos de recogida de biorresiduos, por valor de 10 millones de euros. Igualmente, ha hecho hincapié en las ayudas para instalaciones de tratamiento y mejora de infraestructura existentes, con dos líneas de ayudas de 36 millones de euros (para la construcción y adaptación de instalación de tratamiento de biorresiduos) y otras dos líneas, por valor de 21 millones, para la mejora de instalaciones de tratamiento mecánico-biológico (TMB). A esto, se le suma subvenciones, con una dotación de 35 millones, para la construcción y adaptación de instalaciones de tratamiento de biorresiduos.

Otra de las apuestas del Ejecutivo andaluz es el sellado y restauración medioambiental de vertederos. “El sellado de estos vertederos forma parte de un plan global que prevé una inversión total de 20 millones de euros en la clausura y restauración de vertederos, en varios municipios de Andalucía durante los próximos años”, ha indicado, mencionando actuaciones ya en marcha como las de Castro Filabres y Albox, y las previstas en Berja y Líjar.

Durante su intervención, Catalina García ha señalado que la Junta ha incrementado un 68% la inversión en Economía Circular y gestión de residuos en los presupuestos de 2025, alcanzando los 137,97 millones de euros, un 68% más que el ejercicio anterior. “Este Gobierno tiene un fuerte compromiso con el Medio Ambiente y la Sostenibilidad”, ha afirmado, “y una de las patas fundamentales para conseguirlo es hacer una buena gestión de los residuos en nuestra comunidad autónoma”.

Un marco normativo actualizado y más eficiente

Junto a las medidas de inversión, Catalina García ha remarcado el avance en la planificación y en el marco legal. Así, ha recordado que el Gobierno andaluz aprobó en 2021 el Plan Integral de Residuos de Andalucía (PIRec 2030), una hoja de ruta que recoge los objetivos de prevención, reciclaje y valorización para impulsar un modelo sostenible. “Constituye una herramienta básica para reforzar y acelerar la transición de Andalucía hacia una economía circular, para impulsar la competitividad, crear empleo y generar crecimiento sostenible”, ha afirmado.

Del mismo modo, ha subrayado la relevancia de la Ley 3/2023 de Economía Circular, que establece medidas como el ‘derecho a reparar’, el fomento del consumo responsable, la lucha contra la obsolescencia programada y la reducción del desperdicio alimentario. “Es la primera Ley en aprobarse a nivel regional que aborda la transición hacia la circularidad desde una perspectiva global y transversal a lo largo de sus 94 artículos”, ha destacado.

Asimismo, ha anunciado que la Junta está trabajando en un nuevo Reglamento de Residuos y Economía Circular que abordará, entre otros aspectos, la simplificación de los procedimientos para declarar el fin de condición de residuo y subproducto, así como una regulación más eficiente para la gestión de plásticos agrícolas.

En el cierre de su comparecencia, la consejera ha lanzado un mensaje directo a la ciudadanía: “La gestión adecuada de los residuos es una cuestión que nos afecta a todos. En nuestras manos está el poder de transformar este reto en una oportunidad para construir un mejor futuro para Andalucía”.