La consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Catalina García, ha destacado este jueves en el Pleno del Parlamento de Andalucía el compromiso firme del Gobierno andaluz con la conservación y gestión sostenible del medio natural. Durante su intervención, ha puesto en valor dos medidas clave que refuerzan la política medioambiental de la Administración andaluza: la adquisición de la finca ‘Tierras Bajas’, en el Parque Natural de Doñana, y la firma del Protocolo General de Colaboración con la Federación Andaluza de Caza (FAC), que incluye la incorporación de Andalucía al Observatorio Cinegético.
Así, Catalina García ha subrayado que la adquisición de la finca ‘Tierras Bajas’ supone un nuevo hito en la protección de Doñana y su entorno. Se trata de una superficie de 1.134 hectáreas situadas en el término municipal de La Puebla del Río (Sevilla), dentro del Parque Natural, y su incorporación al patrimonio público, ha dicho, refuerza la gestión medioambiental en una de las zonas de mayor valor ecológico del sur de Europa.
La consejera ha reseñado que esta compra, realizada por un importe de 5,9 millones de euros, se enmarca en el Acuerdo por Doñana, una estrategia integral para la recuperación y conservación del espacio natural firmado entre la Junta de Andalucía y el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Con ‘Tierras Bajas’, junto a la ya adquirida ‘Veta la Palma’, la Junta suma más de 8.700 hectáreas a la gestión pública en el entorno de Doñana, consolidando una de las mayores operaciones de protección medioambiental de las últimas décadas.
García ha señalado que la importancia de ‘Tierras Bajas’ radica en su estado de conservación y en su función ecológica. A diferencia de otras zonas que han sufrido transformaciones, esta finca mantiene su topografía y vegetación naturales, lo que la convierte en un refugio esencial para la biodiversidad. Su conexión con el río Guadalquivir y la cuenca del Guadiamar permite que sea la única marisma dulce que aún funciona de manera natural en el Espacio Natural de Doñana, desempeñando un papel fundamental en la regulación del agua y en la disponibilidad de hábitats para la fauna silvestre.
“La adquisición de esta finca fortalece nuestra capacidad para afrontar los desafíos del cambio climático, al garantizar la conservación de las zonas húmedas y la disponibilidad de agua en momentos críticos”, ha añadido. En este sentido, la consejera ha trasladado que la gestión de ‘Tierras Bajas’ se basa en una estrategia de planificación, restauración y seguimiento continuado, con actuaciones de naturalización a corto, medio y largo plazo.
En el marco del Acuerdo por Doñana, la consejera ha recordado que, hasta el momento, la Junta de Andalucía ha movilizado 831,27 millones de euros, lo que supone un incremento de 102,4 millones (un 14% más) con respecto al compromiso inicial de 728,86 millones. De esta cantidad, ya se han ejecutado 345,43 millones de euros, lo que significa el 47,39% del total inicialmente previsto.
Al respecto, ha remarcado que las medidas del Acuerdo vinculadas al Espacio Natural de Doñana han experimentado un notable avance, con un incremento del presupuesto hasta los 110,64 millones de euros (esto es, 14,34 millones más) y una ejecución del 90,62%. Entre las acciones más destacadas, precisamente, se encuentra la adquisición de las fincas Veta La Palma y Tierras Bajas o la mejora de hábitats de especies emblemáticas, como el lince ibérico.
El compromiso con la gestión sostenible de la caza
Por otro lado, Catalina García ha defendido la importancia del Protocolo General de Colaboración firmado entre la Junta de Andalucía y la Federación Andaluza de Caza, un acuerdo que refuerza la cooperación institucional para mejorar la gestión de la actividad cinegética desde un enfoque basado en el conocimiento científico y la sostenibilidad. “Con la firma de este Protocolo se cumple otro de los compromisos adquiridos por el presidente de la Junta de Andalucía en junio de 2022, con la firma del Pacto Andaluz por la Caza”, ha apostillado.
La consejera ha indicado que este acuerdo supone la incorporación de Andalucía al Observatorio Cinegético, una plataforma digital de seguimiento de especies cinegéticas impulsada por la Fundación Artemisan en colaboración con la FAC. Esta herramienta permite monitorizar en tiempo real la distribución, abundancia y estado de conservación de las poblaciones de fauna cinegética en el territorio andaluz.
García ha señalado que esta iniciativa es fundamental para garantizar que la toma de decisiones en materia de ordenación de la caza se base en datos objetivos. La plataforma permite la recogida de información a través de la aplicación móvil ‘CensData’, donde los cazadores pueden registrar avistamientos y censos de especies, contribuyendo a la generación de un conocimiento detallado sobre su evolución. “Esta información, combinada con el seguimiento anual que realiza la Consejería, permitirá mejorar la planificación de las órdenes de vedas y otras disposiciones en materia de gestión cinegética”, ha afirmado.
Además, la consejera ha puesto de relieve que la caza es una actividad con un gran impacto en la economía rural de Andalucía. Según ha explicado, en la comunidad hay más de 160.000 cazadores con licencia, de los cuales más de 90.000 están federados. Existen más de 7.500 cotos de caza, que abarcan el 81% del territorio andaluz, lo que demuestra la importancia de esta actividad tanto desde el punto de vista medioambiental como socioeconómico.
En este sentido, ha hecho hincapié en que la caza genera alrededor de 45.000 empleos en Andalucía y tiene un impacto en el Producto Interior Bruto de la comunidad de 3.500 millones de euros, según datos de la consultora Deloitte. “Para muchas zonas rurales, la caza no es solo una tradición, sino una fuente de ingresos y un elemento clave para fijar población en el territorio”, ha asegurado.
El Protocolo también contempla la creación de una Comisión Mixta de Seguimiento para evaluar los avances en las distintas líneas de actuación, así como la posibilidad de desarrollar convenios específicos para impulsar nuevas medidas dentro del marco del Observatorio Cinegético.