Ayer, martes 3 de junio, la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Barcelona acogió un emotivo acto de homenaje al profesor Carles Carreras i Verdaguer (Mahón, 1948-2024), catedrático de Geografía Humana y miembro del Grupo de Investigación Consolidado Análisis Territorial y Desarrollo Regional (ANTERRIT). 

El acto, que se llevó a cabo en el Aula Magna de la facultad, consistió en una mesa redonda con la participación de geógrafos internacionales que ofrecieron una mirada plural y diversa sobre la trayectoria del profesor Carreras, y contó, entre otros, con la presencia de su hija Anna Carreras, profesora de la Facultad de Economía y Empresa. La clausura del acto fue a cargo del rector de la Universidad de Barcelona, Joan Guàrdia, que destacó la contribución del profesor Carreras a la geografía urbana y al desarrollo regional. 

Carles Carreras i Verdaguer (Mahón, 1948-2024) fue una figura central de la geografía catalana contemporánea, tanto por su aportación académica como por su compromiso institucional y territorial. Licenciado en Geografía por la Universidad de Barcelona en 1971, inició su trayectoria docente en 1972 como profesor ayudante. Se doctoró en 1978, accedió a la titularidad en 1984 y, solo dos años después, ganó la cátedra de Geografía Humana. Desde 2018, y hasta su muerte, ejerció como profesor emérito en la Facultad de Geografía e Historia de la UB. 

Especialista en geografía urbana y desarrollo regional, destacó por su capacidad de combinar el análisis territorial riguroso con una clara voluntad de proyección social del conocimiento. Fue miembro del Grupo de Investigación Consolidado Análisis Territorial y Desarrollo Regional (ANTERRIT) e impulsó y coordinó proyectos colectivos de gran alcance, como la Geografia general dels Països Catalans (1992-1994), obra de referencia que marcó a una generación de geógrafos y planificadores. Su investigación se centró en la comprensión de los procesos de transformación urbana y territorial, con una mirada crítica y comprometida con el territorio. 

Ocupó varios cargos de responsabilidad en la UB, entre los que destaca el de vicerrector de Relaciones Internacionales e Institucionales entre los años 2008 y 2011. Su vocación universitaria trascendía el aula y el despacho: participó activamente en instituciones científicas como la Sociedad Catalana de Geografía, la Real Academia de Buenas Letras de Barcelona y el Instituto Menorquín de Estudios, donde dirigió la sección de Ciencias Sociales y formó parte del consejo rector y del consejo científico. 

Su vínculo con Menorca fue constante y profundo. En 1996, con el Ayuntamiento de Mahón, impulsó la creación de la Universidad Internacional de Menorca Illa del Rei (UIMIR), un proyecto que contribuyó a acercar el conocimiento universitario a la sociedad menorquina. Fue su primer director académico y mantuvo una presencia activa durante años, lo que favoreció la formación continua y el intercambio científico y cultural desde el Mediterráneo. 

El homenaje sirvió para recordar su figura como docente comprometido, investigador riguroso y persona cercana, que dejó una huella imborrable en la comunidad universitaria y en la geografía catalana.