El vicepresidente de la Diputación de León y diputado de Infraestructuras, Roberto Aller, junto con el vicepresidente para el Bierzo, Luis Alberto Arias, y acompañados por la concejala de Vega de Valcarce, Alba Rodríguez, y la pedánea de Ransinde, Begoña Núñez, han recibido las obras de ensanche y mejora de la LE-4103 que da acceso a la localidad de Ransinde, y donde la institución provincial ha invertido 311.403,71 euros.
La carretera LE-4103, de N-006A en Ruitelán a La Braña, tiene una longitud de 4,804 Kilómetros. La anchura de su calzada alcanza los cuatro metros y, hasta ahora, entre los puntos kilométricos 2+130 y 2+350, es decir, 248 metros, ubicados a la entrada de Ransinde, su anchura se reducía a tres metros y no existe cuneta, lo que dificultaba mucho el cruce de vehículos.
Las obras que se han llevado a cabo consisten en el ensanche de la calzada en el tramo más estrecho de la carretera, es decir, a la entrada de Ransinde, hasta alcanzar un total de cinco metros. Además, se ha llevado a cabo la mejora del firme de todo el tramo de la vía en el que se ha actuado.
También se han mejorado las obras de drenaje, sustituyendo algunas por otras de mayor sección, con lo que se han conseguido 50 centímetros más de vía practicable para el tráfico. Ante el riesgo de desprendimientos, se ha construido un muro de contención de escollera de tres metros de altura en todo el tramo, que se proyectó con la intención de que se integrase en el paisaje, ya que el material de construcción predominante en la zona es la piedra.
Por otro lado, y teniendo en cuenta el desnivel que existía entre la carretera y el terreno circundante en la margen izquierda, se ha colocado una barrera de seguridad tipo bionda en todo el tramo. Además, se ha colocado la señalización vial necesaria, tanto vertical como horizontal, y la protección de la carretera.
Las obras comenzaron durante el mes de julio de 2024, y han finalizado en abril de este 2025.