La consejera de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, María del Carmen Castillo, y el presidente de la de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Javier González de Lara, han firmado en Málaga un protocolo para fomentar e impulsar la Formación Profesional en Andalucía, que a partir de este curso pasa a impartirse en Dual para cumplir con la normativa estatal que regula estas enseñanzas.
Con esta medida, la consejera ha afirmado que «se da un paso más» en la colaboración público-privada con el objetivo principal de ofrecer al alumnado la mejor formación, tanto en el aula, como en la fase de formación en las empresa u organismos equiparados. En este sentido, María del Carmen del Castillo ha incidido en que es esencial que todas las empresas, no sólo las grandes corporaciones, sino especialmente las pymes y micropymes, se sumen a la nueva FP, «porque todas son importantes y necesarias».
Castillo ha explicado que la implantación de la nueva FP supone un cambio conceptual de estas enseñanzas, en el que «las empresas desarrollan un papel crucial para alcanzar el éxito de la nueva Formación Profesional». De ahí que sea «imprescindible» establecer vínculos de colaboración para promover una mayor participación de todos los sectores productivos.
Se trata, ha afirmado la consejera, de establecer alianzas en las que las empresas no sólo contribuirán al crecimiento y desarrollo del entorno donde estén implantadas, sino que también se beneficiarán al incorporar talento joven y cualificado, identificando y formando a potenciales empleados. Asimismo, para el alumnado, la fase de formación en las empresas enriquecerá su formación académica y les brindará la oportunidad de convertirse en magníficos trabajadores que contribuyan al desarrollo social.
Igualmente, Castillo ha mandado un mensaje de tranquilidad a los empresarios, ya que, como en el pasado curso, todo el alumnado estará dado de alta en la Seguridad Social, un coste que no ha sido repercutido en las empresas andaluzas, sino asumido por la Consejería. Tal y como sucede con los centros públicos, tanto al alumnado como a los propios centros concertados, se les exime de cualquier carga burocrática que suponga la cotización de las prácticas no remuneradas.
Por su parte, González de Lara ha señalado que «con esta firma damos un paso más en la implicación que la CEA mantiene con la formación de los jóvenes andaluces. A nadie se le escapa que su impacto positivo pasa por un enorme esfuerzo de la empresa, que aumenta su función y pasa a adoptar un papel protagonista, cambiando su rol al de agente formador del alumno».
Por ello, ha continuado el presidente de CEA, «nos afanamos en la tarea de trasladar la información a las empresas, demostrando nuevamente nuestro compromiso y también la inmensa capacidad de adaptación del mundo empresarial».
El convenio recoge distintas líneas estratégicas tales como promocionar el modelo de FP entre las empresas andaluzas y actuar principalmente para facilitar el desarrollo de la fase de formación de los estudiantes. También se impulsará la transferencia de conocimientos entre el mundo empresarial y el educativo, y se potenciarán acuerdos entre organizaciones empresariales y empresas con la Consejería para la incorporación del alumnado de FP al tejido productivo de Andalucía.