Previo a la cuarta ronda de negociaciones con EE.UU. prevista para el domingo en Omán, el ministro de Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, ha declarado que Teherán no va a desistir de sus «derechos nucleares».
«No vamos a dar marcha atrás en los derechos nucleares de la nación iraní», afirmó este sábdado Araghchi. «Si el objetivo es impedir que Irán acceda a su legítimo derecho a la energía nuclear pacífica, esto no va a pasar», aseveró.
Asimismo, el canciller de la nación persa reiteró que «Irán insiste en su derecho a utilizar la energía nuclear pacífica», lo que «incluye el enriquecimiento de uranio», un aspecto central en la controversia sobre el programa nuclear iraní.
Durante su primer mandato, Donald Trump retiró a Estados Unidos en 2018 del acuerdo nuclear con Irán de 2015, que limitaba el programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de las sanciones económicas, precisamente porque permitía el enriquecimiento de uranio a niveles bajos.
A día de hoy, el enriquecimiento de uranio sigue siendo el principal escollo en las negociaciones. EE.UU. teme que Irán pueda utilizar el enriquecimiento de uranio para desarrollar armas nucleares, una acusación que Irán niega rotundamente, insistiendo en que su programa nuclear tiene fines exclusivamente pacíficos, como la generación de energía y aplicaciones médicas.