INSTALACIÓN DE CAJAS-REFUGIO PARA MURCIÉLAGOS PARA APOYAR EN EL CONTROL DEL MOSQUITO TIGRE

INSTALACIÓN DE CAJAS-REFUGIO PARA MURCIÉLAGOS PARA APOYAR EN EL CONTROL DEL MOSQUITO TIGRE

 

Para la ubicación de las cajas-refugio se han buscado zonas verdes y ajardinadas en la interfaz rural-urbana.

 

El mosquito tigre, adaptado a multitud de hábitats domésticos y peridomésticos, puede transmitir varios arbovirus, entre los que destacan el dengue, chikungunya y zika. Por su parte, los murciélagos pueden consumir entre 1.000 y 3.000 mosquitos en una jornada. También son positivos para el control de otros dípteros que nos causan problemas y molestias a las personas y a nuestras mascotas: por ejemplo, simúlidos, tipo mosca negra, y también flebótomos, que pueden ser vectores de leishmaniosis.

 

Las ventajas más evidentes de este método son el mantenimiento de los equilibrios naturales y la reducción del uso de químicos.

 

Aranjuez, 16 de diciembre de 2024

Al objeto de apoyar en el control del mosquito tigre se ha procedido a la instalación de cajas-refugio para murciélagos, un proyecto piloto propuesto desde la Dirección General de Biodiversidad y Gestión Forestal de la Consejería de Medio Ambiente, Agricultura e Interior de la Comunidad de Madrid, en colaboración con la delegación de Proyectos e Infraestructuras Verde y Azul del Ayuntamiento de Aranjuez, sin menoscabo del resto de actuaciones de prevención y control que se llevan a cabo desde el ámbito de la salud pública, las cuales vienen recogidas en el Programa de Vigilancia Entomológica y Control Sanitario-Ambiental del mosquito tigre (Aedes albopictus).

El control biológico de plagas consiste en fomentar la presencia de los enemigos naturales de la especie que constituye plaga o que es un vector de transmisión de determinadas enfermedades.

El mosquito tigre puede transmitir varios arbovirus, entre los que destacan el dengue, chikungunya y zika. Por su parte, los murciélagos pueden consumir entre 1.000 y 3.000 mosquitos en una jornada. También son positivos para el control de otros dípteros que nos causan problemas y molestias a las personas y a nuestras mascotas: por ejemplo, simúlidos, tipo mosca negra, y también flebótomos, que pueden ser vectores de leishmaniosis.

Para la ubicación de las cajas-refugio para murciélagos se han buscado zonas verdes y ajardinadas en la interfaz rural-urbana. Las cajas-refugio se instalan en grupos de 5-6, más o menos próximas entre sí, en distintos árboles, pero formando un núcleo.

Se trata de ofrecer a los murciélagos distintas posibilidades y algo de heterogeneidad espacial en la medida de lo posible, sobre todo exposiciones variadas. Los murciélagos elegirán las que más les convengan, produciéndose por lo general una ocupación diferencial de los refugios.

Antes de la instalación de las cajas-refugio se ha buscado arbolado con las características óptimas: pies de cierto porte, con troncos o fustes gruesos y preferiblemente libres de ramas en los primeros 3-4 metros, con variadas condiciones de orientación y libres de obstáculos para facilitar el acceso de los murciélagos.

El modelo elegido es una caja plana de “cemento de madera”, una mezcla de serrín de madera (75%), cal, cemento y otros aditivos que proporciona gran durabilidad en la intemperie, resiste el ataque de los pícidos (pájaros carpinteros) y ofrece un microclima interior perfecto gracias a su capacidad aislante y porque permite la transpiración.

Estas cajas constituyen un refugio atractivo para especies de murciélagos fisurícolas, concretamente, se prevé que la colonización de estas cajas será por murciélago enano, una especie abundante en España y muy común en hábitats humanizados.

Las ventajas más evidentes de este método son el mantenimiento de los equilibrios naturales y la reducción del uso de químicos. Esta medida, por sí misma, no va a controlar las poblaciones de mosquito tigre, pero sí puede contribuir positivamente.

Estos trabajos se plantean como un piloto, que tendrá su seguimiento y evaluación en 2025, fundamentalmente en lo que se refiere al grado de ocupación de las cajas, con reubicación en su caso, de aquellas que se considere oportuno, así como también de labores de mantenimiento si son necesarias.

Para saber si estas cajas-refugio resultan efectivas como medida complementaria para el control de las poblaciones de mosquito tigre habrá que hacer estudios más a medio plazo en coordinación con los responsables en sanidad ambiental.

Respecto al mosquito tigre

El mosquito tigre se ha adaptado a multitud de hábitats domésticos y peridomésticos haciendo posible que realice su ciclo casi en cualquier recipiente artificial que retenga agua (macetas, floreros, neumáticos, alcantarillado, imbornales, etc.). Estos elementos se encuentran, en muchos casos, en el ámbito de las viviendas privadas, tipo unifamiliares, que disponen de patios o jardines, donde además el mosquito encuentra las plantas que necesita para su alimentación.

Última vez modificado: 16 diciembre, 2024