Gaza: el hospital Nasser al borde de la parálisis

Gaza: el hospital Nasser al borde de la parálisis

Las restricciones de movimiento y las dificultades de acceso al hospital complican cada vez más la provisión de atención médica y la llegada de pacientes


06/06/2025

En el sur de Gaza, las órdenes de desplazamiento y las restricciones de movimiento impuestas por las autoridades israelíes al hospital Nasser están llevando a este vital centro médico al borde de la parálisis.

“A lo largo de estos últimos 20 meses, ordenar a los hospitales que rechacen nuevos pacientes y dificultar el acceso de las personas a los centros de atención médica ha sido una práctica habitual de las fuerzas israelíes para desmantelar el sistema de salud”, afirma José Mas, responsable de la Unidad de Emergencias de Médicos Sin Fronteras (MSF). Para miles de heridos y personas con necesidades médicas, el Nasser es el último recurso al que pueden agarrarse. Por ello, es de vital importancia que pueda funcionar de nuevo a pleno rendimiento y que se garantice la seguridad del personal médico, los pacientes y las instalaciones.

El 3 de junio, nuestros equipos fueron informados de que, a partir de ese momento, cualquier traslado al hospital Nasser requeriría de autorización y que la solicitud tendría que hacerse con al menos 24 horas de antelación. Por esta razón, el personal médico del turno diurno no pudo llegar al hospital y el equipo de la noche anterior tuvo que seguir trabajando. Debido a esta circunstancia, los profesionales permanecieron un total de 48 horas consecutivas trabajando.

El servicio de consultas ambulatorias estuvo cerrado todo el día. Las ambulancias que lograron trasladar pacientes al hospital lo hicieron asumiendo un enorme riesgo, ya que, al no haber autorizado sus movimientos, existía la posibilidad de que les dispararan. “El hecho de que el Nasser se encuentre junto a uno de los frentes de combate más activos dificulta el acceso tanto del personal médico como de los pacientes a este hospital”, afirma José Mas.

En Gaza las personas están exhaustas, con sus vidas destrozadas por 20 meses de una guerra extremadamente violenta y por un asedio asfixiante, donde incluso la distribución de cantidades mínimas de ayuda acaba convirtiéndose en masacres. En este contexto, todas las instalaciones médicas que siguen operativas, aunque sea parcialmente, resultan de vital importancia y deben ser protegidas.

Los ataques a la misión médica no se limitan a la acción militar. Se producen mediante restricciones a la entrada de suministros médicos, que obliga al personal médico a racionar los analgésicos. Tienen lugar mediante órdenes de desplazamiento, que obligan a hospitales enteros a cerrar sin apenas tiempo para trasladar a los pacientes, y mediante el acoso y las órdenes confusas emitidas por las autoridades israelíes, que dificultan cada vez más el poder proporcionar atención médica vital.

“Ya hemos visto este patrón antes”, dice José Mas. “Ocurrió en instalaciones como Al Awda y en el Hospital Indonesio, en el norte de Gaza, donde primero se les pidió que no admitieran a más pacientes, y pocos días después fueron atacados y prácticamente obligados a cerrar. Dejar fuera de servicio el hospital Nasser equivaldría a una sentencia de muerte para los pacientes más graves: personas adultas y menores heridas, pacientes críticos y mujeres que necesitan atención obstétrica de emergencia”.

“Es fundamental que las autoridades israelíes protejan el hospital Nasser y garanticen el acceso pleno y sin trabas tanto a los pacientes como al personal médico para evitar más muertes».
José Mas, MSF en Gaza

El Nasser es un gran hospital de referencia con numerosas áreas especializadas que no se encuentran en ningún otro lugar del sur de Gaza, incluyendo quirófanos, una planta de oxígeno, respiradores, un banco de sangre, una unidad de pacientes quemados e incubadoras. Reducir el acceso a este hospital y bloquear las derivaciones de pacientes que necesitan atención especializada de emergencia impide que las personas reciban el tratamiento que podría salvarles la vida.

En los últimos meses, los equipos médicos de MSF en el hospital Nasser han atendido a más de 500 pacientes en la sala de maternidad, incluyendo mujeres que requerían atención quirúrgica, así como a más de 400 recién nacidos y pacientes pediátricos. El hospital está repleto de pacientes con quemaduras y traumatismos graves.

Ataques constantes a la atención médica

La atención médica está siendo constantemente atacada en toda Gaza. Uno de los últimos ejemplos tuvo lugar en la mañana de este miércoles 4 de junio, cuando las fuerzas israelíes atacaron tres veces el hospital Al Aqsa, apoyado por MSF y principal centro médico en Deir Al Balah, en el centro de Gaza. Aunque no se reportaron víctimas es un duro recordatorio de cómo los pacientes, el personal y las instalaciones médicos corren un riesgo constante en Gaza.

Por otro lado, nuestros equipos han atendido en los últimos días a decenas de personas que resultaron gravemente heridas por disparos mientras intentaban conseguir alimentos en los centros de distribución de la Fundación Humanitaria para Gaza. Esto pone bajo mayor presión aún a los pocos hospitales que quedan, que ya se encontraban desbordados de personas heridas en los continuos bombardeos que se producen en la Franja.

“Es fundamental que las autoridades israelíes protejan el hospital Nasser y garanticen el acceso pleno y sin trabas tanto a los pacientes como al personal médico para evitar más muertes”. concluye José Mas.

Deja un comentario