Los 79 integrantes de la 62 promoción de la carrera fiscal juraron o
prometieron ayer sus cargos en un acto presidido por el Fiscal General
del Estado, Álvaro García Ortiz, celebrado en la Real
Academia de la Lengua.
El Fiscal General estuvo acompañado en la presidencia por la Teniente
Fiscal del Supremo, Mª Ángeles Sánchez Conde, y por
Jefa de la Inspección, Mª Antonia Sanz Gaite. Al acto
asistieron además numerosos Fiscales de Sala y varios Fiscales
Superiores. El Fiscal de Sala de la Unidad de Medio Ambiente,
Antonio Vercher, apadrinó a la promoción, mientras
que la madrina fue la Fiscal de Sala Jefa de la Secretaría Técnica,
Ana García León.
Previamente, las 56 alumnas y los 23 alumnos que integran esta
promoción recibieron sus despachos en una ceremonia presidida por
S.M. el Rey que se desarrolló por la mañana en el
Paraninfo de la Universidad Complutense.
Es este acto asistieron además el Ministro del Interior,
Fernando Grande-Marlaska, en representación del
Ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes,
Félix Bolaños; el Secretario de Estado de Justicia,
Manuel Olmedo, y la Secretaria General para la
Innovación y Calidad del Servicio Público de Justicia, Sofía
Puente, además de la directora del Centro de Estudios
Jurídicos, Laura Cambero, y numerosos representantes
de las carreras fiscal y judicial, además de familiares y amigos de
los nuevos fiscales.
Principios constitucionales
En su intervención, el Fiscal General pidió a los integrantes de la
62 promoción que se mantengan siempre en la senda de los principios
constitucionales ya que la misión constitucional del Ministerio Fiscal
es fundamental para el Estado de Derecho. «Nos erigimos en
garantes de la legalidad y en valedores de los derechos de la
ciudadanía», aseguró.
El estricto cumplimiento de la legalidad como expresión de la
voluntad popular soberana; la imparcialidad, actuando rectamente
despojados de cualquier prejuicio; la unidad de actuación y la
dependencia jerárquica, como herramienta para garantizar la seguridad
jurídica y la igualdad de toda la ciudadanía ante la ley deben ser los
principios que guíen la actuación de todos los fiscales, según dijo
García Ortiz.
«La administración de Justicia no es sino el único instrumento
de defensa de los débiles frente a los poderosos, es el reino de la
razón frente al de la fuerza, el de la palabra frente a la violencia.
En definitiva, es la garantía de una sociedad igualitaria y
solidaria», señaló.
El Fiscal General destacó también que la protección y atención a las
víctimas, los menores, las personas y colectivos más vulnerables es
una de las principales señas de identidad del Ministerio Fiscal, por
lo que pidió a los nuevos fiscales que asuman este compromiso de
vocación de servicio público desde la responsabilidad y también desde
el respeto a la dignidad de la persona «cualquiera que sea su
condición u origen».
Un año de formación
Tras aprobar la oposición, los nuevos fiscales han realizado durante
un semestre el curso selectivo de acceso en el Centro de Estudios
Jurídicos con un enfoque eminentemente práctico, además de recibir las
competencias, habilidades y conocimientos necesarios para su desempeño.
Posteriormente, se han incorporado durante otros seis meses a
prácticas tuteladas en las Fiscalías Provinciales y de Área, bajo la
dirección y supervisión de un equipo tutorial.
La edad media de esta promoción es de 29 años. El 25 % de los nuevos
fiscales procede de Andalucía y el 18 % de Madrid, mientras que
Cataluña, Castilla y León y la Comunitat Valenciana aportan del 8 %
cada una.