La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, durante su intervención (EFE)
Durante su intervención, Saiz ha anunciado la publicación en los próximos días del nuevo Reglamento de la Ley de Extranjería, orientado a potenciar las vías de migración legal y a agilizar procesos, como la reagrupación familiar y la regulación de trabajos temporales.
Estas reformas, en línea con las directivas de la UE, están diseñadas para responder tanto a las demandas del mercado laboral español como a los derechos y necesidades de los migrantes.
«En España estamos redoblando esfuerzos por robustecer nuestro marco normativo de la migración para brindar seguridad jurídica tanto a las empresas como a los propios migrantes, facilitando su integración en el mercado laboral y en la sociedad española, con sumo respecto a los derechos humanos», ha señalado en su discurso.
La ministra también ha destacado el proceso de diálogo que ha acompañado la reforma del Reglamento de la Ley de Extranjería, en el cual han participado más de 120 actores, incluyendo ONG, organizaciones profesionales y administraciones locales y autonómicas. Con el respaldo de la Comisión Laboral Tripartita de Inmigración y la Comisión Interministerial de Migraciones, se ha buscado construir un marco legal que refleje las necesidades actuales del mercado laboral y los propios migrantes.
Migración regular, ordenada y segura
Saiz ha subrayado el enfoque «transversal y estructural» que el Gobierno de España aporta a la gestión migratoria. Por ello, ha explicado la puesta en marcha de programas centrados en el fomento de la migración laboral que, unido a las reformas normativas en curso, el fortalecimiento de las infraestructuras de acogida y la colaboración internacional permiten una migración regular, ordenada y segura.
«En un contexto global donde la escasez de mano de obra y los cambios demográficos son cada vez más evidentes, la contribución de los trabajadores migrantes es indispensable para el crecimiento económico sostenido y el desarrollo social». Y ha añadido: «La movilidad humana responde a un deseo histórico de mejores oportunidades y dignidad».
Actualmente, más de siete millones de personas extranjeras cuentan con documentación de residencia en vigor en España, reflejo de un marco normativo que se adapta a las necesidades tanto de los migrantes como de la sociedad española.
«Este Ministerio ha impulsado políticas de inclusión laboral para facilitar el acceso de los migrantes a sectores con déficit de mano de obra, junto con programas de formación y capacitación laboral. Además, trabajamos en un Plan de Integración y Convivencia Multicultural. Una estrategia para los próximos años que nos servirá de hoja ruta para la inclusión social y económica de los migrantes en nuestra sociedad».
Cooperación internacional y enfoque en derechos humanos
La ministra ha destacado también la importancia de la cooperación con países de origen y tránsito. España ha renovado sus acuerdos internacionales, con cláusulas específicas sobre derechos humanos y servicios básicos para los migrantes, alineándose con los objetivos de la OCDE en el fortalecimiento de relaciones de cooperación y la reducción de riesgos en el tránsito migratorio.
«Hemos invertido en modernizar y adecuar nuestros recursos de acogida, con el objetivo primordial de que las personas que llegan a nuestras costas puedan recuperar la salud tras sus traumáticas travesías, con especial atención al ámbito de la salud mental. Brindar unas condiciones dignas y la protección de los derechos de los migrantes, es para nosotros una máxima irrenunciable», ha concluido.