El PP afirma que con Sánchez “la corrupción inunda a su Gobierno, a su partido y a su entorno familiar

La senadora del GPP, Inmaculada Hernández
La senadora del GPP, Inmaculada Hernández

El que nos daba lecciones de decencia hace 10 años ahora es el maestro de la corrupción, ‘el uno’ en los papeles de la trama corrupta

Los senadores del Grupo Parlamentario Popular, Inmaculada Hernández y Javier Campoy, afirman que Pedro Sánchez “ha conseguido que la corrupción inunde a su Gobierno, a su partido y a su entorno familiar más cercano”.

Así lo denuncian los senadores del PP durante el debate de una moción, aprobada hoy en el Pleno de la Cámara, en la que instan al Ejecutivo a colaborar con la Justicia para esclarecer los casos de corrupción que le afectan directamente, a cesar en sus maniobras de desinformación y a asumir sus responsabilidades políticas.

Inmaculada Hernández, portavoz adjunta del GPP, asegura que “el que nos daba lecciones de decencia hace 10 años, ahora es el maestro de la corrupción, ‘el uno’ en los papeles de la trama corrupta”, al tiempo que recuerda que “ni un solo ministro de Rajoy tenía abierta una causa judicial”.

“La corrupción cerca al presidente con su esposa y hermano imputados, el que fuera su mano derecha -Ábalos- imputado, el Fiscal General del Estado imputado, 15 delitos investigados y 11 ministerios implicados”, dice dirigiéndose a la bancada socialista. “Ustedes vinieron a combatir la corrupción y lo que hacen es ejercitarla”, añade.

Además, Inmaculada Hernández critica a los socialistas por no hacer “autocrítica, jalear a su jefe y aplaudir a los corruptos”, en referencia a lo ocurrido en el Congreso Federal del PSOE con Chaves y Griñán, condenados en sentencia firme por el Tribunal Supremo. “Ustedes blanquean y aplauden la corrupción y a los corruptos”, remarca.

Resalta que “conocemos un caso diario de corrupción socialista desde que Víctor de Aldama decidió tirar de la manta, implicando a altos cargos del PSOE, a varios ministros e incluso a Sánchez”.

Reprocha a los socialistas que digan que un imputado –en referencia a Aldama- no tiene credibilidad, cuando la misma Begoña Gómez lo está; o que lo ridiculicen diciendo que es un agente de la TIA, cuando a las 48 horas se publica una foto suya de montería con los directivos de la CIA y el CNI. “Ustedes le condecoraron con una medalla y estuvo en Ferraz la noche electoral”, apunta la senadora popular.

“Llevamos un ritmo de corrupción que asusta y ustedes se quieren presentar como víctimas de una cacería política, pero su victimismo no cuela, aquí las únicas víctimas son los españoles”, subraya Inmaculada Hernández, al tiempo que acusa a los socialistas de ser “los fabricantes de bulos y los que se mueven muy bien en el fango”.

Para finalizar, la portavoz adjunta del GPP critica la politización de las instituciones, “hasta 25 instituciones bajo el poder absoluto del PSOE”; así como que “altos cargos del Gobierno se estuvieran forrando durante la pandemia”.

TRES LÍNEAS DE CORRUPCIÓN

En el turno de portavoces, el senador Javier Campoy pone de relieve “las tres líneas de corrupción –Gobierno, PSOE y ámbito familiar- que convergen en una sola persona, Pedro Sánchez, conocido como el número uno”.

Así, enumera la agenda judicial de Sánchez en los próximos días: “El día 12 de este mes declara el que fue su ministro para todo, el del Peugeot, el señor Ábalos, que se benefició presuntamente de un chalé de más de medio millón de euros y 400.000 € en mordidas; el 16 su conseguidor, Aldama, que tenía pase VIP en la sede del PSOE; el 17 Koldo, el chófer de Sánchez en las primarias y el guardián de los avales; y el 18 su mujer, acusada de cuatro delitos y un quinto que puede estar al caer por utilizar a una asesora de Moncloa en sus negocios personales”.

También se refiere a los otros cargos señalados por Aldama, como Santos Cerdán, quien presuntamente recibió 15.000 euros; el jefe de gabinete de María Jesús Montero, con una mordida de 25.000 euros; y la empresaria que llevo bolsas de dinero a Ferraz.

Durante su intervención, Javier Campoy denuncia “el uso partidista de las instituciones” y recuerda que “se usó la Moncloa como epicentro de la guerra sucia contra adversarios políticos, con la connivencia del Fiscal General del Estado”.

“Sánchez pasará a la historia por ser el presidente de este país con más casos de corrupción que afectan a su gobierno, a su partido y a su familia”, concluye Javier Campoy.