La resolución provisional de la convocatoria Consolidación Investigadora 2024 del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades reconoce la labor de dos proyectos de la Universidad de La Laguna con cerca de 400.000 euros. Estas ayudas tienen como objetivo fomentar la consolidación de la carrera profesional de personas investigadoras, para que pueda desarrollarse dentro del Sistema Español de Ciencia, Tecnología y de Innovación (SECTI). Por ello, dentro del presupuesto concedido para la financiación de un proyecto propio de I+D+i, una partida presupuestaria está reservada para gastos de adecuación de espacios de laboratorio con el fin de que la persona pueda reforzar su línea de investigación en la institución de acogida.

Los proyectos de la Universidad de La Laguna beneficiados en la resolución de esta convocatoria competitiva son “La artesanía del olvido: una aproximación multianalítica a la cestería y la cordelería aborigen de Canarias (PERISHABLE)”, liderado por la investigadora Paloma Vidal Matutano, del departamento de Geografía e Historia, y «Regulación del ADN parasitario por el complejo de mantenimiento estructural de los cromosomas Smc5/6 (Pac-Man)», a cargo del investigador Jonay García Luis, perteneciente al Instituto de Tecnologías Biomédicas.

El proyecto PERISHABLE tiene como objetivo analizar las técnicas y usos ancestrales de la artesanía vegetal aborigen canaria por medio del estudio integral de restos de cestería y cordelería producidos por las poblaciones aborígenes que llegaron al archipiélago hacia el siglo I-II d.C. desde el norte de África. Para Vidal Matutano, esto contribuirá a un mejor conocimiento sobre las estrategias de subsistencia aborígenes, el acervo ecológico tradicional y el manejo tradicional de los recursos de las comunidades indígenas de Canarias antes de la colonización europea. Para ello, PERISHABLE aplicará una aproximación interdisciplinar basada en arqueobotánica, arqueología experimental, etnoarqueología, metabolómica, análisis isotópicos y análisis de residuos.

Un aspecto relevante de este proyecto es la inclusión en el equipo de colaboradores locales en el norte de África para el trabajo de campo etnoarqueológico en comunidades bereberes, así como la colaboración con los artesanos canarios que trabajan actualmente la palma y el junco y que contribuirán al estudio de las técnicas de producción de cestería aborigen.

El proyecto comenzará con la identificación de las materias primas utilizadas por las poblaciones aborígenes de Canarias, la caracterización de las técnicas de producción, la datación por Carbono 14 de algunas piezas arqueológicas y el desarrollo de sesiones de arqueología experimental con artesanos canarios con el fin de reproducir las técnicas de manufactura de los objetos. Le seguirá un bloque de trabajo de campo etnoarqueológico al que se sumarán comunidades bereberes del norte de África. Finalmente, se aplicarán metodologías de vanguardia con el fin de obtener información sobre los criterios de recolección de plantas, su gestión y posible procedencia.

Por su parte, el proyecto liderado por el investigador Jonay García tiene como objetivo comprender cómo las células protegen su ADN frente al ADN parasitario que forma parte de nuestro genoma. Estas secuencias de ADN parasitario pueden moverse dentro del genoma, provocando cambios genéticos que, en algunos casos, contribuyen al desarrollo de enfermedades como el cáncer o trastornos neurodegenerativos.

El proyecto, que tendrá una duración de dos años, busca entender cómo un complejo proteico denominado Smc5/6 contribuye a mantener la estabilidad del ADN al controlar estos elementos móviles. Para ello, se combinarán diversas técnicas de biología molecular y genómica, utilizando levaduras como modelo de estudio y analizando muestras de pacientes con cáncer.

En primer lugar, se estudiará la proteína Smc5/6 en levaduras, un organismo modelo que facilita el análisis de cómo interactúa con el ADN parasitario. Luego, se analizarán células humanas, incluidas muestras de pacientes con cáncer, para verificar si existe una relación entre la actividad de estos elementos móviles y la enfermedad. Finalmente, se integrarán los resultados obtenidos, con el objetivo de comprender mejor los mecanismos celulares y explorar posibles aplicaciones en el tratamiento del cáncer.

Este estudio podría abrir nuevos horizontes en la medicina y la biología, ya que ayudaría a comprender cómo el complejo proteico Smc5/6 regula el ADN, lo que podría conducir a la identificación de nuevas dianas terapéuticas. Además, podría mejorar el diagnóstico de enfermedades, permitiendo detectar signos tempranos de inestabilidad genética. Por último, contribuiría al conocimiento sobre la evolución de nuestro genoma, dado que estos elementos móviles han jugado un papel clave en la historia de la genética.

La convocatoria de proyectos Consolidación Investigadora 2024 se enmarca dentro del Plan Estatal de Investigación Científica y Técnica y de Innovación 2024-2027 del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades.