El consejero de Cultura, Turismo, Deporte y Juventud, José Luis Pérez Pastor, el director general de Cultura, Roberto Iturriaga, y el alcalde de Nájera, Jorge Salaverri, han visitado hoy, día 8, el Monasterio de Santa María la Real de Nájera, cuyo antiguo palacio abacial y botica serán restaurados a lo largo de los próximos meses gracias a un proyecto del Ejecutivo regional que cuenta con una inversión global de 1.295.472,97 euros, financiados mediante los fondos Generation Next EU.
Enmarcado dentro del Componente 14 del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia con el que impulsar la modernización y competitividad del sector turístico, este proyecto, cuya fase de licitación concluirá mañana, “busca destinar en su totalidad esta casa Abacial como Museo Najerillense, tras una necesaria restauración con un saneamiento general del forjado, la mejora de la eficiencia energética y la climatización del edificio. Además, se va a hacer frente a las humedades que presenta”.
De esta forma, y gracias a la colaboración entre el Gobierno de La Rioja y el Ayuntamiento de Nájera, como ha subrayado el alcalde, “vamos a poder recuperar y ampliar este Museo que debe permanecer en este espacio para mantenerlo vivo y se convierta en un atractivo turístico más para Nájera y para La Rioja”.
El desarrollo de estas obras, cuyo valor histórico se debe respetar, además de dotarlo de una funcionalidad turística, contemplan el recalce de la cimentación; la excavación con control arqueológico de planta baja; la ejecución de forjado sanitario con previsión de ventilación de los muros de carga; o el levantado de forjados de las plantas alzadas, a excepción de la planta primera que tendrá un tratamiento particular debido a las pinturas y colgantes de escayola del techo de planta baja.
Además, a lo largo de los ocho meses estipulados para la ejecución de las obras, se realizará un refuerzo del forjado de la planta primera para un uso público; la ejecución de los forjados de planta segunda y planta bajo cubierta; el estudio y recuperación de los huecos de fachada originales; y la restauración de los elementos originales del edificio (puertas, cancela, cielos rasos, pinturas, etc.).
También se prevé la instalación de un sistema de calefacción sectorizado por plantas y espacios; la ejecución de una nueva instalación de electricidad; la sustitución o restauración de la carpintería actual para obtener una carpintería estanca y con óptimas condiciones aislantes, así como la aplicación en todo el edificio de un tratamiento preventivo contra las termitas.