El ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha calificado como “la mayor transformación de la Justicia en décadas”. Gracias a la Ley de reforma y reforzamiento de las carreras judicial y fiscal el proceso de oposición será endurecido al incorporar una prueba escrita. También se mejora la igualdad de oportunidades. Según datos del ministro, el 95% de quienes acceden a una plaza de juez o fiscal han necesitado la ayuda económica de su familia. Aquellos opositores que no dispongan de recursos económicos podrán recibir una beca con un importe idéntico al Salario Mínimo Interprofesional durante cuatro años.
Además, el Centro de Estudios Jurídicos empezará a actuar como centro público de preparación de opositores, con dependencias en diferentes provincias del país para seguir acercando la Justicia a todos los territorios. En este sentido, cualquier preparador tendrá la obligación de estar inscrito en un registro que ha de ser público.
El Gobierno, consciente de la necesaria agilidad del servicio público que es la Justicia, ampliará las plazas de jueces y fiscales, creando un cuarto turno para estos últimos y convocando plazas para el cuarto turno de juez simultáneamente a otras convocatorias. Otra cuestión destacada por Félix Bolaños ha sido la estabilización laboral de los jueces y fiscales sustitutos que se llevará a cabo.
Más autonomía para la Fiscalía General
En cuanto a la reforma del Estatuto de la Fiscalía General, el ministro de Justicia ha avanzado que el mandato de dicha institución quedará desligado del mandato del Gobierno que lo haya nombrado, pasando a tener una duración de cinco años y tasando aún más los motivos de cese, quedando fuera la pérdida de confianza por parte del Gobierno.
Además, la instrucción judicial y penal pasará a ser responsabilidad de la Fiscalía, al igual que ocurre en todos los países de nuestro entorno. Precisamente, ese es uno de los criterios a la hora de realizar estas reformas, acercarnos a los mejores sistemas judiciales de la Unión Europea.
Para Félix Bolaños, esta es una reforma que incorpora “todos los requerimientos del GRECO” y que cuenta con “el aval” del Consejo General del Poder Judicial y del Consejo de Estado. “Será un sistema más europeo y más garantista”.