Delantales, recetas caseras y consejos maternales y conyugales son algunos de los ingredientes del éxito de las tradwives, las esposas tradicionales en las redes sociales. En nuestro país, un ejemplo es Roro, una influencer con 2,5 millones de seguidores que resuelve todas las necesidades culinarias y diarias de su novio: desde hacerle los espaguetis caseros con pesto a la genovesa hasta encuadernarle un libro con sus propias manos. En Estados Unidos e Inglaterra, este movimiento de mujeres tradicionales, que se ha expandido al mundo digital en poco tiempo, tiene por referentes a Ayla Stewart o Estee Williams. «Los contenidos de las tradwives se enmarcan en un fenómeno global de mujeres que enaltecen los roles de género tradicionales, aquellos relacionados con las tareas de cuidados y el trabajo reproductivo y que reivindican el regreso de las mujeres a la esfera doméstica, mientras que se enaltece a los hombres como los proveedores económicos», explica Sònia Herrera, profesora de los Estudios de Ciencias de la Información y de la Comunicación de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).
Mujeres tradicionales en las redes: un fenómeno digital con trasfondo ideológico
En las redes sociales, y en concreto en Instagram, YouTube y TikTok, es donde han encontrado el espacio en el que proyectarse y mostrar un estilo de vida más próximo a la década de los años cincuenta que al siglo xxi. «Han encontrado resonancia, patrocinio y aprobación en el ecosistema digital, y utilizan esas plataformas para difundir una visión del matrimonio, de la feminidad y de la familia nuclear heteronormativa que creíamos, si no abolida, al menos sí puesta en crisis», afirma Herrera. Según la experta, en su narrativa, además de recetas caseras elaboradas, ofrecen consejos sobre cómo ser una buena esposa y madre, y exhortan a las seguidoras a encontrar satisfacción y realización en el hecho de servir a sus parejas y en el cuidado del hogar.