Dentro de pocos años, la población mayor de 65 años será la franja poblacional más numerosa de la sociedad y, por tanto, serán necesarias medidas para mejorar su atención y asegurarle un envejecimiento saludable. A pesar de las recomendaciones internacionales de actividad física, en general las personas mayores todavía participan poco en programas de ejercicio físico y la que toma parte no mantiene la actividad física una vez termina el programa, disminuyendo sus efectos beneficiosos. Con todo, el proyecto “Enjoy physical activity to battle sedentary behaviour and inactivity among older adults from socially inclusive perspective (Join4Joy)”, liderado por Laura Coll-Planas, como investigadora principal del proyecto y miembro del grupo de investigación Methodology, Methods, Models and Outcomes of Health and Social Sciences (M₃O), ha propuesto centrar las propuestas de actividad física para personas mayores en el disfrute y la inclusión social -dos elementos avalados por la ciencia- como vía de éxito para conseguir la continuidad de estas personas en los programas, tanto en entornos comunitarios como residenciales.
En el proyecto europeo “Join4Joy”, coordinado por la Universidad de Vic – Universidad Central de Catalunya (UVic-UCC), se ha observado que en las residencias, donde lo habitual es que las personas usuarias sufran un declive funcional progresivo ya menudo rápido, los valores de función física y calidad de vida de antes y después de la intervención de los programas de actividad física (en un transcurso). Ahora bien, «teniendo en cuenta que la población de las residencias es frágil y con un alto deterioro físico y cognitivo, nuestros resultados apuntarían a un posible efecto protector de la intervención sobre el estado de salud», explica Javier Jerez-Roig, investigador del proyecto y coordinador del grupo de investigación M₃O de la UVic-UCC.
Gimnasia de la felicidad
De hecho, la buena acogida que ha tenido el programa de actividad física del proyecto «Join4Joy» ha llevado a algunos usuarios a denominarlo «la gimnasia de la felicidad», dado que para muchos de ellos las sesiones no eran vistas sólo como clases de ejercicio físico sino también como ratos de divertimento y relación social. «El proyecto se ha dirigido especialmente a poblaciones vulnerables, con el objetivo de romper las barreras existentes de acceso que con frecuencia tienen que ver con un bajo nivel socioeconómico o educativo, con minorías sociales y étnicas, personas con movilidad reducida, y personas con déficits visuales o auditorios o bien con deterioro cognitivo», explica Laura Coll-Planas.
El proyecto “Join4Joy” ha llevado a cabo catorce pruebas piloto, ocho de las cuales se han realizado en entornos comunitarios (una en Cerdanyola del Vallès, una en Sabadell, dos en Italia y cuatro en Dinamarca, con un total de sesenta y siete usuarios finales) y seis se han realizado en entornos residenciales (una en Manlleu, una en Sant Hipòlit de Voltregà, dos en Alemania y dos en Francia, con un total de ochenta y dos usuarios finales). En total han participado en el proyecto ciento cincuenta personas mayores de 65 años, de las que se han obtenido datos de movilidad, funcionalidad, calidad de vida, autonomía, sedentarismo y nivel de actividad física, así como información cualitativa de su satisfacción con el programa y mejoras percibidas.
Los estudios piloto han constado de doce sesiones de actividad física de una hora de duración y han sido dirigidas por profesionales entrenados con el enfoque Join4Joy, que han mostrado una muy buena acogida del proyecto y han manifestado haber percibido mejoras en el ámbito social y emocional de los usuarios finales. En este proyecto también han participado profesionales calificados de la Fundación Salud y Envejecimiento (Universidad Autónoma de Barcelona), así como investigadores y estudiantes de la Fundación Blanquerna (Universidad Ramon Llull).
Cocreación y formación
El proyecto “Join4Joy” se ha basado en métodos de cocreación o ciencia participativa, por lo que usuarios finales, familiares, expertos, gestores, profesionales y estudiantes se han involucrado desde el principio en el diseño del planteamiento del proyecto.
Uno de los objetivos del proyecto «Join4Joy» era ofrecer formación especializada para profesionales y estudiantes del ámbito de la salud y la actividad física, que les proporcionara herramientas adicionales para desarrollar intervenciones centradas en la persona, el disfrute y la inclusión social. En este sentido, en el marco del proyecto se ha creado un curso de formación gratuito, disponible online en cinco idiomas, que consta de doce cápsulas de unos ocho minutos de duración. Este curso, con certificado final expedido por la UVic-UCC, tiene por objetivo dotar a las personas que trabajan o se forman para trabajar en entornos comunitarios (centros cívicos, centros de día, polideportivos, centros de personas mayores, residencias, etc.) de estrategias para diseñar planes de actividad física centrados en los usuarios, utilizando técnicas de motivación, gamificación y cambio comportamental.
El proyecto europeo “Join4Joy”, con una duración de tres años (2022-2025) y financiado por el programa de la CE Erasmus-Sport, ha tenido como socios del proyecto la Fundación Blanquerna (Universidad Ramon Llull), la Fundación Salud y Envejecimiento (Universidad Autónoma de Barcelona), la Universidad del Sur, SDU ( (Alemania), el Instituto Europeo para el Desarrollo Socioeconómico, el ISES (Italia) y la Asociación Siel Bleu (Francia).
Acto de clausura del proyecto
Los resultados del proyecto “Join4Joy” se darán a conocer en un acto de clausura que tendrá lugar el próximo lunes 5 de mayo, de 8.45 a 11.00 h, en la Facultad de Psicología, Ciencias de la Educación y del Deporte Blanquerna-Universitat Ramon Llull. En este acto se realizará balance del proyecto y de su evolución; habrá la intervención de varios profesionales del ámbito sociosanitario, que explicarán su experiencia; se dará a conocer cuál es la formación que ha resultado del Join4Joy, y habrá un turno de debate y reflexiones abiertas. La jornada será organizada por los tres socios catalanes del proyecto: la Fundación Blanquerna, la Fundación Salud y Envejecimiento y la UVic-UCC.