‘¿Dónde está papá?’, un cuento pionero para ayudar a los niños a entender la privación de libertad
Laura Delgado Carrillo, profesora de la Facultad de Derecho de la UNED, ha presentado en la sede de Escuelas Pías de UNED Madrid el cuento ‘¿Dónde está papá?’, ilustrado por Lorena Zamora Blanco y pensado para que niños y niñas entiendan, desde distintos puntos de vista, qué implica que sus progenitores se encuentren privados de libertad en una institución penitenciaria.
Tras dos años de trabajo y esfuerzo, la profesora Laura Delgado Carrillo presentó el pasado viernes en la sede de Escuelas Pías de UNED Madrid el cuento infantil ¿Dónde está papá?, una obra pionera “y muy necesaria […] para explicarle a los hijos de quienes cumplen condena dónde están sus padres y cómo va a tener que ser su relación con ellos mientras estén privados de libertad”. En el acto estuvo acompañada de la ilustradora de la obra, Lorena Zamora Blanco; de Miguel Ángel Vicente Cuenca, director General de Ejecución Penal y Reinserción Social de Instituciones Penitenciarias, y de varios internos y funcionarios del Centro Penitenciario de Alcalá-Meco. La obra se acerca a la situación de estos menores desde dos perspectivas distintas: la estrictamente penitenciaria y la psicológica y emocional, con el objetivo de ayudar a los más pequeños a entender los motivos de la ausencia parental, resolver dudas e inquietudes para reducir sus niveles de ansiedad, miedo e inseguridad, y trasladar recomendaciones a las personas cuidadoras para gestionar la situación.
La autora del cuento explica que “hay tantos mitos, prejuicios y tabúes en torno a las prisiones, que lo normal es que las familias no sepan cómo abordar la privación de libertad de sus seres queridos cuando tienen que afrontar la situación con los más pequeños de la casa”; por ello, en la mayoría de los casos tienden a mentir, a ocultar la situación a sus hijos para evitar el estigma o, simplemente, no saben cómo abordar el tema. Delgado añade que “es normal que no sepan afrontarlo, puesto que no hay ningún recurso para ayudar a estas familias a gestionar tan compleja situación”.
En cualquier caso, añade la profesora, “mentir nunca es la solución”, puesto que solo serviría para que las dudas y miedos habituales de los niños, tales como “¿ha ido papá a la cárcel por mi culpa? ¿volverá antes a casa si saco buenas notas? ¿papá es mala persona?” se sustituyeran por otras igual de graves como “¿papá no está conmigo porque prefiere trabajar? ¿papá no está porque no me quiere? ¿son las otras cosas más importantes que yo? ¿me están diciendo la verdad?”. Las recomendaciones profesionales en este sentido son tan claras que “era necesario, urgente e imprescindible poder plasmarlas en un libro ilustrado que se dirija a quienes se encuentran en edad escolar”, concluye la autora.
¿Por qué papá y no mamá?
¿Y por qué el cuento se titula ¿Dónde está papá? y no ¿Dónde está mamá? o ¿Dónde están mis padres?… La propia autora lo explica: “nuestra historia ha optado por hacerse eco de la escena más recurrente en nuestro entorno, que es la de la privación de libertad de papá con mamá asumiendo el rol de cuidadora. Además, el grueso poblacional de nuestras prisiones está constituido en más de un 90% por hombres”. “No obviamos”, añade, “los problemas adicionales que tienen las mamás cuando las que están en prisión son ellas. La maternidad en prisión es arduamente compleja y nada comparable a lo que este cuento refleja. Cuando las que delinquen son ellas, el panorama de relaciones filiales se complejiza hasta lo indecible”.
El hecho de que el protagonista sea un niño, Nicolás, tampoco es fruto del azar. “Los datos revelan que los niños tienden a reproducir los roles delincuenciales de sus progenitores en mayor medida que las niñas, por lo que hemos querido centrarnos donde más hay que prevenir para que nuestros pequeños grandes lectores puedan identificarse más fácilmente con la trama de este cuento”.
El proyecto, que ha contado con aportación económica oficial de la UNED para cubrir los costes de ilustración, diseño y maquetación, se ha financiado principalmente a través de un proyecto de crowdfunding puesto en marcha por las responsables de la obra. El proceso, “muy emocionante porque vimos cómo presos y funcionarios contribuían de igual manera en una misma iniciativa”, destacó por la “enorme diversidad de las personas que contribuyeron a la recaudación final de más de 5.200 euros”, señala la autora.
El cuento, ya publicado, pretende convertirse en un proyecto más ambicioso: “estamos trabajando en una página web, enlacarcel.com, porque nuestra intención es aprovechar el lanzamiento del cuento para impartir talleres formativos y divulgativos tanto en centros penitenciarios (dirigidos a la población reclusa), como en instituciones educativas (dirigidos a la infancia y la adolescencia) y otros foros asociativos o sociales (dirigidos a la sociedad en general)”, concluye la profesora.