Detectada en España una nueva especie de araña exótica

La URJC colidera un estudio sobre la fauna arácnida de los ecosistemas subterráneos de Carmona (Sevilla). Esta investigación ha revelado la presencia de una especie exótica de araña, Howaia mogera, de origen asiático. A partir de estos hallazgos, se rastreó la expansión a escala mundial de esta especie, que parece haberse acelerado en la última década.

Alba Junquera

El estudio forma parte de un proyecto de investigación liderado por Fernando Cortés-Fossati, miembro del Grupo de Ecología Evolutiva del área de Biodiversidad y Conservación de la URJC, y en el que también han participado la Universidad Autónoma de Barcelona, la Universidad Europea de Madrid, el Grupo Ibérico de Aracnología y la Asociación Andaluza de Exploraciones Subterráneas.

El principal objetivo de este proyecto fue analizar la fauna nativa de artrópodos cavernícolas en los acueductos subterráneos de Carmona (Sevilla), ya que existe una gran laguna científica en torno a este tipo de ecosistemas. Para abordar esta carencia de información, el equipo de especialistas realizó una expedición a los acueductos de origen romano. Este tipo de arañas nestícidas se caracterizan por habitar en lugares húmedos como puede ser cuevas.  Dado que este lugar forma parte del patrimonio histórico protegido, se diseñó una meticulosa estrategia de captura manual para no dañar las estructuras del monumento. Esta técnica fue llevada a cabo por dos de los coautores del trabajo, pertenecientes a la Asociación Andaluza de Exploraciones Subterráneas y la Universidad Europea. Posteriormente, se realizó un análisis taxonómico de los ejemplares.

Los resultados de este trabajo, publicados en la revista internacional Arachnology determinaron que se trataba de Howaia mogera, una especie de araña muy pequeña de origen asiático que muy probablemente ya se encuentra establecida en la zona. Según este estudio, lleva más de 50 años expandiéndose fuera de su área nativa, quizás gracias al flujo de mercancías, que le ha permitido llegar a más de 13 países en todo el mundo. Fernando Cortés-Fossati destaca que es indispensable seguir monitorizando de cerca a esta especie, ya que aún quedan preguntas por responder. Una de las más importantes es saber si se trata de una especie invasora, es decir, que pueda producir efectos adversos en los ecosistemas en los que es introducida, o si es meramente exótica. Ha de tenerse en cuenta que nuestro país cuenta con una gran cantidad de especies subterráneas endémicas, varias de ellas amenazadas.

“El estudio surge a partir de la necesidad por investigar la fauna de los ecosistemas subterráneos, que están bastante olvidados, en especial los artrópodos como las arañas. Esta falta de información es preocupante en el contexto del cambio global, ya que no nos permite comprender ni detectar los impactos que pueden estar afectando a las especies nativas que habitan en estos ecosistemas”, explica el investigador de la URJC.

Esta investigación quiere destacar la falta de información que existe sobre los ecosistemas subterráneos. Esta situación lleva a que la aparición de nuevas especies exóticas genere preocupaciones legítimas sobre posibles impactos negativos inadvertidos que puedan afectar a los ecosistemas en que son introducidas.  Por último, según apunta Cortés-Fossati, “el estudio también pretende dejar claro el valor de generar conocimiento básico en ciencia, pues ha sido gracias a la combinación de estudios taxonómicos y ecológicos, que se ha detectado a esta araña”.

Imagen fer arana

Imagen: hembra de Howaia mogera (Yaginuma, 1972). Fotografía de A.L. González-Moliné. B: Ilustración del macho con su órgano copulador característico, de J.A. Barrientos. C. Infografía datada de los países a los que la especie ha llegado, realizada por Irene Martín-Rodríguez y Fernando Cortés-Fossati.

La importancia de las arañas

Las arañas son los depredadores más diversos y eficientes del mundo, por lo que son indispensables para que la especie humana exista. Por eso es fundamental estudiar a estos animales por su verdadero valor ecológico y no limitar su atención al temor que provocan unas pocas especies de importancia médica. “Cuanto peor grado de conocimiento tengan nuestras arañas autóctonas, menos nos interesen, más las impactemos y tratemos mal, más proclives van a ser a que se las deje de lado en las políticas conservacionistas y a que sufran impactos que las pongan en peligro”, apunta Fernando Cortés-Fossati. La investigación quiere poner de relevancia la necesidad de conocer y valorar a las arañas, basarnos en información científica fiable y dejar atrás el sensacionalismo con el que los medios, de forma innecesaria, alarman a la población al presentarlas como peligrosas.