La consejera de Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía, Patricia del Pozo, ha participado en Córdoba el acto de clausura del 40 aniversario de la inscripción de la Mezquita-Catedral en la Lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO. El calendario de actividades conmemorativas de esta efeméride ha culminado con la celebración de una mesa redonda institucional, un encuentro en el que han participado, asimismo, el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández; el alcalde de Córdoba, José María Bellido Roche; el presidente de Diputación Provincial, Salvador Fuentes Lopera; la subdelegada del gobierno en Córdoba, Ana María López Losilla, y el prefecto para el Dicasterio de la Cultura y la Educación del Vaticano, José Tolentino de Mendoça, entre otras personalidades.
En su intervención, Patricia Del Pozo ha repasado los logros que hicieron posible este reconocimiento el 2 de noviembre de 1984. «Hace cuatro décadas, Córdoba recibió la mejor de las noticias posibles: la inscripción de la Mezquita-Catedral de Córdoba en la lista de Bienes de Patrimonio Mundial». Una inscripción que «no vino sola», sino que, en el caso andaluz, estuvo «acompañada por la de la Alhambra y el Generalfe«, así como por tres enclaves españoles.
Era ésta la primera vez que el Comité de la Convención para la Protección del Patrimonio Mundial de la UNESCO incluía obras españolas en la lista de Patrimonio Mundial que para entonces sumaba 156 monumentos de distintos países. «Se terminaba así con casi 15 años de clamorosa ausencia de los bienes patrimoniales españoles en esta prestigiosa lista», ha recordado la consejera de Cultura y Deporte.
La inscripción de la Mezquita-Catedral de Córdoba en la Lista de la UNESCO en 1984 fue el resultado de casi diez años de «ejemplar trabajo previo impulsado por la ciudad de Córdoba y su Cabildo catedralicio«. Pero, por encima de otras consideraciones, este reconocimiento, «abrió el camino al resto de bienes patrimoniales andaluces» y supuso «la asunción de un compromiso constante con la preservación e investigación del monumento», ya que UNESCO, valora, por encime de todo, «las propuestas con proyectos de gestión que aseguren el mantenimiento de la integridad y preservación de los bienes», en palabras de la consejera.
«El compromiso para la salvaguarda de la conservación y la difusión de la Mezquita-Catedral en el que el Cabildo de la Catedral de Córdoba siempre encontrará el apoyo de la Consejería de Cultura y Deporte«. «Una sociedad que conoce y valora su patrimonio histórico es una sociedad más rica, más sabia y más plural. Y, desde luego, mejor preparada para afrontar su futuro y el de su patrimonio», ha destacado.
En este sentido, del Pozo ha avanzado la idoneidad de la futura Ley de Patrimonio Cultural, llamada a sustituir a la Ley de Patrimonio histórico que ya data de 2007, como una norma más moderna, más ágil y más versátil para velar por la protección y difusión del Patrimonio Histórico de la Comunidad Autónoma Andaluza.
Un concierto, interpretado por la Orquesta y Coro de la Catedral de Córdoba, ha puesto el punto final a este calendario conmemorativo que ha sido impulsado por el Cabildo de la Catedral de Córdoba a lo largo de todo el año, con un amplio programa de actividades como conferencias, jornadas académicas, congresos, conciertos, actuaciones teatrales, exposiciones y encuentros con numerosos colectivos implicados en la gestión y conservación del inmueble.
Bienes andaluces Patrimonio de la Humanidad
En la actualidad, España cuenta con un total de cincuenta bienes inscritos en la Lista de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, de los cuales ocho son andaluces: la Mezquita-Catedral de Córdoba, ampliado en 1994 al centro histórico de la ciudad; la Alhambra y el Generalife, ampliado también en 1994 al Albaicín; la Catedral, el Alcázar y el Archivo de Indias de Sevilla (desde 1987); las Pinturas Rupestres del Arco Mediterráneo de la Península Ibérica (desde 1998); los Conjuntos Monumentales Renacentistas de Úbeda y Baeza (desde 2003); el Sitio de Los Dólmenes de Antequera (desde 2006); la Ciudad califal de Medinat al-Zahra, la última, por el momento, en sumarse a esta lista en 2018, además del Parque Nacional de Doñana, incluido desde 1994 en la categoría de Bien Natural.
A esta lista se suman también las manifestaciones culturales andaluzas reconocidas como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad: el flamenco, la dieta mediterránea, la fiesta de los patios de Córdoba; el saber artesanal de la cal de Morón; los Coliblancos y Colinegros de Baena; la técnica de la piedra en seco; la transhumancia y el toque manual de campanas.