29/05/2025
Cultura inicia el procedimiento para declarar bien inventariado el mural de Párraga en el colegio Príncipe de España en Alhama de Murcia
La declaración establece una garantía de conservación de esta pieza pictórica del patrimonio cultural regional
Una imagen del mural de Alhama de Murcia firmado por Párraga.
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Con la apertura del expediente, la Consejería de Turismo, Cultura, Juventud y Deportes inicia el procedimiento para declarar como Bien de Interés Inventariado el mural realizado por el pintor José María Párraga, en 1971, en el interior del colegio público Príncipe de España, en Alhama de Murcia.
La declaración como bien inventariado se fundamenta en el valor artístico intrínseco de la obra, así como en las circunstancias específicas de su ubicación y uso, que la hacen especialmente vulnerable. La catalogación permitirá establecer unas garantías mínimas de protección y conservación, contribuyendo a preservar esta valiosa pieza del patrimonio cultural murciano.
«Se trata de garantizar la conservación de una de las piezas singulares del patrimonio artístico contemporáneo regional, obra de uno de los creadores más influyentes del panorama cultural murciano del siglo XX», apuntó el director general de Patrimonio Cultural, Patricio Sánchez.
El mural fue objeto de una intervención por parte del Centro de Restauración de la Región de Murcia en 2005, tras los numerosos daños que había sufrido a lo largo del tiempo, en gran parte por la instalación de elementos superpuestos que alteraban su integridad visual y material.
Se trata de una pintura acrílica de grandes dimensiones (2,62 x 11,70 metros), que ocupa por completo una de las paredes del pasillo del centro educativo y está firmado por Párraga en el ángulo inferior izquierdo. En él se representa una escena protagonizada por dos niños con pájaros en un campo de flores, mediante un lenguaje estilizado y ornamental, caracterizado por la viveza del color, la expresividad de las formas y el uso de tintas planas.
José María Párraga (Cartagena, 1937-Murcia, 1997) es una de las figuras fundamentales del arte murciano de la segunda mitad del siglo XX. Su aportación no solo radica en la calidad técnica y estética de su obra, sino también en su capacidad de innovación formal y en su voluntad de ampliar los soportes tradicionales del arte, llevándolo más allá del formato de caballete. Destaca especialmente por su producción mural en espacios públicos, instituciones y edificios privados, convirtiéndose en una referencia ineludible para comprender el arte contemporáneo de la Región.