Durante esta jornada, la comunidad universitaria dedicó un tiempo especial para honrar la historia de estos santos y sus ejemplos de vida. Desde quienes colaboraron en labores educativas, sociales, sacramentales y de investigación, hasta los jesuitas que han sido compañeros de camino. Esta celebración permitió reconocer el compromiso de aquellos que, con fe y esfuerzo, han construido el entorno en el que hoy se desarrolla la misión de Comillas.
La festividad concluyó con una oración especial en la que se llamó a los más jóvenes a seguir uniéndose al servicio de la Compañía de Jesús. La celebración recordó el compromiso y la perseverancia necesarios para continuar el legado de san Ignacio, como parte de una Compañía inspirada en el Evangelio y en el servicio a la humanidad.