La consejera de Transición Ecológica, Industria y Comercio, Belarmina Díaz, ha señalado que dos de sus prioridades desde su nombramiento son las de fortalecer el diálogo con los agentes sociales y mantener una relación estable con las empresas industriales que están más expuestas y en situación compleja. Díaz ha defendido, por esta razón, que los contactos con ArcerlorMittal o las ingenierías «no son una fotografía» porque «son continuos».
«No cabe duda de que, en este escenario, tan complejo e imprevisible, una de las máximas prioridades como consejera es atender las emergencias que afectan a la industria asturiana en general, y a la siderurgia y al sector del acero en particular», ha señalado en el Pleno de la Junta General.
La consejera ha remarcado que la industria es «irrenunciable» y en estos momentos su prioridad es seguir trabajando con el Gobierno de España y con la Comisión Europea, «pues hoy más que nunca la industria en general y la siderurgia, en particular, dependen de las políticas europeas». «Estamos trasladando la urgencia de las medidas a aplicar que derivan del Clean Industrial Deal, como el arancel ambiental a la entrada de acero sucio», ha concluido.