Atletismo, hockey, patinaje y fútbol: instalaciones remodeladas

A Rivas le gusta el deporte. Y, en muchas ocasiones, modalidades que no figuran entre las más practicadas en las estadísticas nacionales. Más allá del balón de fútbol o de baloncesto hay experiencias que merecen vivirse. El sófbol, el béisbol, el waterpolo, el hockey patines, el tenis de mesa, el voleibol o el atletismo presentan cuotas de participación por encima de la media estatal.

Pero sostener esa afición tan variopinta, que enriquece el panorama deportivo de cualquier localidad, obliga a disponer de una variada red de infraestructuras. Y en eso Rivas ha puesto empeño desde que iniciara su desarrollo urbanístico a mediados de los años ochenta del siglo pasado.

Y es que en materia de gestión pública, tan importante como crear un servicio o infraestructura es preservarlo en el tiempo con unos estándares de calidad. “Un reto al que no somos ajenos los municipios que aspiramos a preservar el título de ‘ciudades del deporte’. Y para conservar hay que invertir”, explica la vicealcaldesa y concejala de Deportes, Mónica Carazo.

A punto de cumplirse el ecuador de la legislatura (2023-2027), el Ayuntamiento ha pisado el acelerador en mejora de infraestructuras deportivas. El esfuerzo inversor ha alcanzado los 2,26 millones de euros en solo tres instalaciones que se han beneficiado de importantes remodelaciones: el estadio de atletismo del polideportivo Cerro del Telégrafo, con su nuevo tartán (222.970 euros); los dos campos de fútbol de Casa Grande, con el cambio de césped artificial (513.479 euros); y el centro de patinaje y hockey, con la creación de un nuevo edificio con seis vestuarios, almacenes y sala de formación (1,52 millones).

Han pasado varios meses desde el estreno de las novedades y toca evaluar, escuchando a quienes usan cotidianamente estos espacios. Este reportaje propone un pequeño viaje de instalación en instalación, en compañía de los clubes deportivos que ya disfrutan de las transformaciones. Empecemos por donde todo es pisada nueva: el estadio de atletismo.

Integrantes del club Running Rivas. MARIO F. TREJO

1. ESTADIO DE ATLETISMO: NUEVA PISTA DE TARTÁN

Inversión: 222.970 euros.

Es un martes por la mañana. Y el color rojo ladrillo del nuevo tartán de la pista de atletismo del polideportivo Cerro del Telégrafo luce intensamente mientras acolcha el trote de una treintena de deportistas. Gente que empieza el día ejercitando piernas y pulmones. Algunos esprintan. Otros progresan en carrera suave. Destaca un grupo numeroso, de una veintena de corredoras y corredores, con sus camisetas rojas: son integrantes del club Running Rivas, creado en 2011 y que actualmente agrupa a un centenar de socias y socios.

Áurea Muñoz Hernández, ingeniera de software de 44 años, es ripense desde hace siete primaveras, cuando se mudó de París. Su afición a la carrera despertó en 2010. “Pero en la capital de Francia corría por mi cuenta y por el bosque. No tenía un club cerca. Cuando llegué a Rivas busqué un grupo para mejorar, porque no progresaba en velocidad ni resistencia. Como teletrabajo, vi que Running Rivas tenía sesiones por las mañanas y me vino fenomenal”. Ya ha completado tres medias maratones (21 kilómetros), con un mejor registro de 1.55 horas.

“El nuevo tartán me parece una maravilla. Se necesitaba. Estamos encantadas. El anterior ya tenía baches y te exigía estar pendiente para no dar un mal paso. Se nota en la amortiguación y en la comodidad de la pisada. Creo que incluso vamos más rápidas. Y te puedes concentrar mejor al hacer series”, resume Áurea. “Tener una instalación como esta es fundamental para la gente que corremos. Y más en una ciudad como Rivas, que también tiene sus cuestas, aunque no lo parezca. Aquí podemos hacer series y mejorar la calidad y eficiencia de los entrenamientos”.

“El nuevo tartán me parece una maravilla. Se necesitaba. Estamos encantadas. Parece que corremos más rápido”

A su lado, Laura Pérez Lodín, de 49 años y tramitadora de siniestros. Ripense veterana –se vino con su familia a los 12 años-, corre desde 2012: “No soy muy rápida, pero me gusta la media distancia, la media maratón. Vengo martes y jueves a la pista, de 10.00 a 11.15. Y los domingos quedamos a las 9.00 para hacer tiradas largas por los cortados y lagunas. Esperábamos este nuevo tartán. Entrenamos mucho mejor. Se agradece al Ayuntamiento que lo haya puesto. Se nota en la amortiguación de piernas. Y, al hacer el salto al correr, las zapatillas se clavan mucho mejor”.

¿Qué supone el atletismo para esta exvallecana? “Me da mucha vida. Cuando empiezas, te duele todo, pero poco a poco, con un entrenamiento persistente, progresas mucho: yo no me veía haciendo medias maratones y las hago”. Y añade: “Si no salgo a correr, me falta algo. Los compañeros son maravillosos. A parte del ejercicio, que te sientes fenomenal, te levantas por la mañana con la alegría de ir a entrenar. Una alegría que no vives cuando vas a trabajar”.

Entre zancada y zancada, surge la amistad. Y el amor. “Aquí se han conocido personas que ahora son pareja”, revela Laura. También emprenden quedadas ciclistas. El grupo completó pedaleando hace unas semanas el camino de Uclés desde Rivas.

“Con el nuevo tartán es otra cosa, porque la antigua reparación duró poco y tuvo muchos baches e incidencias. Esta reforma se ha hecho bien”, describe Francisco Javier Fernández, de 63 años y vecino desde hace 32.

¿Qué aporta una pista de atletismo a una ciudad como Rivas? “Mira a tu alrededor”, invita Francisco Javier: “La estampa habla por sí sola. La cantidad de personas que la utilizan y lo bueno que es para una ciudad disponer de una instalación como esta. Cada vez hay más afición a correr. Y si tienes una pista para poder especializarte en el tema del running, mejor”.
La pista sobre la que entrenan está homologada para competiciones internacionales.

Estrenada en 1997 y con una única remodelación en 2017, se compone de un anillo de 400 metros de cuerda con ocho calles. Además, se despliegan dos calles de salto de longitud de 100 metros. Y en la semiluna del fondo sur, espacio para los saltos de altura y pértiga. Una ría de agua permite la celebración de los 3.000 obstáculos. Y el interior del anillo lo ocupa un campo de fútbol, donde también se juega al rugby. Esa pradera posibilita los lanzamientos de disco, peso y jabalina. El menú completo para un evento de atletismo con todas sus modalidades. Una grada, a cubierto de la lluvia y con capacidad para 920 espectadores, permite la contemplación de una manera cómoda.

Baño en el nuevo vestuario del centro de patinaje. MARIO F. TREJO

2. CENTRO DE PATINAJE: NUEVO EDIFICIO PARA VESTUARIOS

Inversión: 1.529.556 euros.

El centro de patinaje, alojado también en el polideportivo municipal Cerro del Telégrafo, acoge la práctica de dos deportes: hockey sobre patines y patinaje artístico. En su fachada meridional se ha adherido un edificio de nueva construcción, cuya inversión es la más alta de las tres instalaciones descritas en este reportaje. La planta baja (923 m2 de superficie construida y 827 m2 de superficie útil) se ha destinado a vestuarios y un aula de formación para 60 personas. La planta superior, de una tremenda luminosidad, albergará en un futuro las oficinas de la Concejalía de Deportes, ahora ubicadas en el edificio de la piscina climatizada.

Los vestuarios, que también dan servicio a los equipos de béisbol y sófbol, cuyos campos de juego colindan por uno de sus laterales, se dividen en seis: cuatro grandes de 57 m2, dos pequeños de 42 m2 y otro par de 20 m2 para árbitros. Además, los almacenes para la guarda de materiales ocupan 80 m2. Y un vestíbulo, aún no operativo, funcionará como zona de recepción y control de acceso. Todas las puertas tienen sistema domótico inteligente. Y las luces de vestuarios se encienden según detectan la presencia de personas.

Moisés Escudero Ruiz, de 45 años, es el director deportivo y entrenador del primer equipo masculino del club de hockey sobre patines Rivas Las Lagunas, una entidad referente en la Comunidad de Madrid y que ha conseguido importantes resultados en el panorama estatal, dominado con tiranía por los equipos catalanes.

Moisés lleva 20 años en el club, que en 2026 cumplirá un cuarto de siglo. Sentado en la grada que da a la pista de hockey (otra obra acabada en enero de 2024 que permitió la ampliación de asientos de 216 a 356), evalúa el nuevo edificio de vestuarios: “Ha sido un paso fundamental para el club. Antes nos teníamos que cambiar en otro edificio. Ahora disponemos de este espacio, ubicado, además, estratégicamente detrás de una de las porterías, con lo que el acceso a pista es muy rápido”.

“El nuevo edificio de vestuarios es un paso fundamental para el club de hockey”. También para el de patinaje

“Para el día a día de los entrenamientos”, prosigue, “es fantástico. Y ya para la alta competición es imprescindible y Rivas da otra imagen”. Al cierre de esta edición, el equipo masculino sénior acariciaba al cierre de esta edición el ascenso a la máxima categoría nacional, la OK Liga, donde ya jugó en 2024. Y el femenino juega en OK Bronce [en OK Liga en 2016-2017 y 2008-2009].

Moisés Escudero, del club Rivas Las Lagunas, en el nuevo edificio de vestuarios del centro de patinaje. MARIO F. TREJO

“Para los equipos de base, este vestuario nuevo ofrece más tiempo de estar juntos, con ese momento de vestuario. Se convive más. Al final queremos que sientan el club, sientan la ciudad y se enganchen al deporte”, explica Moisés. Alrededor de 170 jóvenes y personas adultas practican hockey en Rivas. Y 60 niñas y niños se forman en la escuela deportiva municipal (sin competición ni ficha federada). El club cuenta esta temporada con 20 equipos. Todos mixtos hasta infantil. Cinco son femeninos: sub 13 (campeonas autonómicas), sub 15, sub 17 (subcampeonas de Madrid), Primera Autonómica y el sénior de OK Bronce. Los equipos alevín B y A han firmado una temporada histórica, proclamándose campeón y subcampeón regionales.

“Somos de los clubes de Madrid con más equipos de base en competición. No es normal que un club con tan poca historia tenga estos éxitos. Se está trabajando bien”, concluye el director deportivo.

Césped nuevo en el campo de fútbol de Casa Grande. NACHO ABAD ANDÚJAR

3. CAMPOS DE FÚTBOL DE CASA GRANDE: NUEVO CÉSPED ARTIFICIAL

Inversión: 513.479 euros.

Dos de los sietes campos de fútbol 11 que existen en la ciudad se ubican en las instalaciones de Casa Grande, en la zona del casco antiguo, junto a la estación de metro de Rivas Vaciamadrid. El césped artificial de ambos terrenos, y el de la zona de calentamiento, se sustituyó en otoño de 2024, con una inversión que superó el medio millón de euros. La remodelación incluyó otras actuaciones, como la sustitución del programador de riego, o la adquisición de porterías nuevas (cuatro ancladas al suelo para fútbol 11, ocho ancladas y replegables para fútbol 7 y tres móviles con ruedas para fútbol 11).

Manuel de Arcos, a sus 63 años, es el presidente de la Asociación Deportiva Parque del Sureste desde su fundación en 2002. La entidad cuenta con 37 equipos, entre federados y escuelas municipales, y 652 jugadores [en Rivas existen cinco clubes de fútbol que se reparten por las otras instalaciones públicas de Santa Ana, El Vivero y el polideportivo Cerro del Telégrafo].

“El nuevo césped ha quedado muy bien. Hacía falta. Se nos hace algún charco cuando hay lluvias muy fuertes, pero hasta los equipos contrarios nos dicen que está muy bien colocado”, comenta Manuel de Arcos, que en su juventud jugó de central en Tercera Regional: llevaba el dorsal 5, cuando los números reflejaban la posición del jugador y las camisetas no lucían nombres ni publicidad.

“El nuevo césped ha quedado muy bien, nos lo dicen los equipos que vienen de fuera a jugar a Casa Grande”

Los campos de Casa Grande, recostados en una esquina del casco antiguo, habitan en medio de esa placidez rústica que se respira en las calles de los pueblos. Y sestean junto a un estupendo entorno natural. Si se prolonga la mirada más allá de los banderines del córner sur, se otean los cortados de Casa Eulogio, donde se unen los ríos Jarama y Manzanares.

Es una tarde de martes, y las cigüeñas garabatean el cielo. Y Manuel lo reconoce: “El entorno es fabuloso. Justo en la entrada tenemos un nido de cigüeñas. Los equipos visitantes, cuando vienen, se sorprenden de su presencia. Soy senderista y esta zona es una maravilla. Y tenemos la boca de metro en la puerta del estadio”, lo que permite a la chavalada ganar en autonomía en sus desplazamientos a las instalaciones. El deporte como forma de pasar por la vida en buena compañía. Y bombeando el corazón.

Irene de Arcos y Manuel de Arcos son mánager general y presidente de la Agrupación Deportiva Parque del Sureste, club con 38 equipos y 652 jugadores. NACHO ABAD ANDÚJAR