“Tengo el honor de comunicar que el Ministerio de Transportes ha iniciado el procedimiento de oficio para el cambio de denominación de la estación de tren de Córdoba por el de ‘Estación de Córdoba-Julio Anguita’. Así lo anunciaba a los medios poco antes de las 10,00h. de esta mañana a las puertas de esa misma estación Antonio Maíllo, coordinador federal de Izquierda Unida, visiblemente satisfecho aunque contenido.
Lo hizo rodeado de un buen número de representantes de las direcciones autonómica, provincial y local de IU, entre ellos/as sus coordinadores andaluz y cordobés, Toni Valero y Sebastián Pérez, respectivamente, así como Juan Hidalgo, portavoz del Grupo Municipal Hacemos Córdoba al que pertenece IU, entre otros/as. Pero Maíllo quiso sobre todo agradecer la “ayuda y colaboración para que esto sea una realidad” de quienes “sin duda son la mejor representación el Julio, su familia”, que encabezaban en el sencillo acto “Agustina Martín, su compañera de vida, y su hija Ana Anguita”, además de Carmen y Juan, sus otros hijas/os que “por motivos laborales no se pueden encontrar aquí”.
Ana Anguita mostró directamente su “alegría” por la aprobación de la iniciativa y reconoció que “hoy es un día muy importante para la familia”. Al tiempo, agradeció “a la ciudadanía de Córdoba” el apoyo para que la estación “por fin” vaya a llevar el nombre de su padre, además del respaldo que ya tuvo por parte del Ayuntamiento cordobés y, ahora, del ministerio.
“Nos sentimos enormemente orgullosos -dijo-, porque por fin la estación lleva el nombre de mi padre, pero como ciudadana me parece un acto de justicia que sea posible que en la ciudad que quería, por la que trabajó durante tantos años y en la que convivía algo lleve su nombre”.
Antonio Maíllo, por su parte, detalló que la decisión “se toma como homenaje a la figura de Julio Anguita precisamente en el 5º aniversario de su fallecimiento” y que han sido “su contribución como el primer alcalde democrático desde la II República a la ciudad de Córdoba y a la democracia las razones fundamentales que llevan al Ministerio de Transportes a aceptar y promover este cambio de denominación”.
Indicó también que una vez completado el trámite administrativo “que se ha comunicado esta mañana al Ayuntamiento de Córdoba, se prevé que la resolución de la secretaría de Estado del ministerio sea antes del verano”.
“Estamos ante una noticia estupenda -destacó Maíllo- por una propuesta que tenía el clamor popular, que fue presentada en el Ayuntamiento a iniciativa de colectivos como el Colectivo Prometeo, y que hizo suya el grupo municipal de Hacemos Córdoba, del que forma parte Izquierda Unida, y que también, afortunadamente, lo hizo el Ayuntamiento, coincidiendo con ese clamor popular”.
En el apartado de agradecimientos, citó al ministro Óscar Puente por “la sensibilidad que ha tenido en el trámite de este proyecto y por el detalle simbólico de que sirva también como homenaje a la figura de Julio en el 5º aniversario de su fallecimiento”.
Aludió también a “Enrique Santiago, diputado de IU por Córdoba y secretario general del PCE, que se ha desvelado por conseguir ese trámite también a nivel parlamentario”, así como “el interés desplegado por Toni Valero”, también diputado de IU en el Congreso por Málaga y coordinador andaluz de IU, sin olvidar a María Jesús Montero en su calidad de vicepresidenta del Gobierno.
Toni Valero destaca la ‘memoria imborrable ‘ de Julio
Para Antonio Maíllo, la figura de Julio Anguita “trasciende Córdoba” y va más allá también de “las coordenadas políticas de las formaciones en las que militó, el PCE e IU”.
En una breve intervención, Toni Valero destacó también que la figura de Anguita “está en la memoria imborrable de la clase trabajadora andaluza y española” y aludió a que supuso una “referencia ética y moral no solo para la izquierda, sino para cualquier demócrata de bien”.
“Ha sido -recordó- uno de los dirigentes más brillantes que ha brindado a este país Izquierda Unida, pero no es un patrimonio exclusivo de nadie, sino un bien común que, como su memoria, se tiene que cuidar”, ante de apostillar que, como hizo Julio Anguita, “la izquierda tiene que anteponer siempre los intereses colectivos a las interferencias personales”.