El Consejo de Gobierno ha aprobado una declaración institucional con motivo del Día de Andalucía, que se celebra el próximo 28 de febrero, en la que reclama su lugar en una España de iguales, sin privilegios ni desniveles, destacando que los andaluces somos la Europa del Sur y reclamando al mundo lucidez, sensatez, sensibilidad, moderación, civilización y humanidad.
En este sentido, el Gobierno andaluz reivindica que «esta conmemoración es, pues, una cita abierta a todos, una emoción compartida, una efusión de la amplitud de miras, la generosidad, la alegría y la humanidad que son el santo y seña de Andalucía», al mismo tiempo que recuerda a los andaluces en el exterior, «esa prodigiosa novena provincia, que son ejemplo de amor a sus raíces y que anhelamos ver regresar, aunque nunca se fueron del todo».
Texto íntegro de la declaración institucional del Consejo de Gobierno con motivo del 28 de febrero, Día de Andalucía:
Hace cuarenta y cinco años, el 28 de febrero de 1980, los andaluces decidimos, por primera vez en nuestra historia, de forma masiva y en un ejercicio ejemplar de democracia, que nunca más volveríamos a ser menos que nadie. Hoy, cuarenta y cinco años después, esa determinación late más fuerte y viva que nunca en las actuales generaciones, herederas de un sentimiento que, desde entonces hasta ahora, se ha ido enriqueciendo con nuevas razones para amar a nuestra tierra y comprometernos con ella. En plena transformación hacia el liderazgo entre las autonomías españolas y las regiones europeas; en claro proceso de avance social, económico, ambiental, científico y tecnológico gracias a la labor de todos; en una entusiasta conquista del porvenir que ha sabido conservar y reforzar sus señas de identidad más propias, su cultura y sus tradiciones, Andalucía es ahora, más que nunca, una realidad en la que creer, donde prosperar, a la que volver. Por eso, con ocasión del Día de Andalucía, como hicimos hace cuarenta y cinco años, llenamos de nuevo las calles y plazas, los colegios donde se forman nuestras hijas e hijos y se forja el futuro de este pueblo, las residencias de nuestros mayores donde vive la experiencia y la sabiduría, las ventanas y balcones abiertos a nuestros sueños, los patios y las avenidas donde ya se anuncia la primavera del Sur envuelta en la enseña de nuestra tierra: la bandera que izaron los grandes andaluces, hombres y mujeres, que nos precedieron; la que conquistaron nuestros predecesores con amor y empeño y la que simboliza nuestras mayores esperanzas de justicia, igualdad, libertad y progreso.
El 28 de Febrero es un día de celebración y convivencia, de exaltación de las mil formas de ser y de sentir que embellecen nuestros pueblos y ciudades, nuestra tierra, componiendo las peculiaridades, las singularidades y el carácter de cada rincón de Andalucía, en toda su inmensa diversidad. Esta fecha convoca, también, especialmente, a los andaluces en el exterior, esa prodigiosa novena provincia, que son ejemplo de amor a sus raíces y que anhelamos ver regresar, aunque nunca se fueron del todo; y a quienes, siendo de otras procedencias, han descubierto el Sur, han depositado aquí sus sueños, los han visto crecer y ya solo se entienden siendo parte de nuestro destino.
Esta conmemoración es, pues, una cita abierta a todos, una emoción compartida, una efusión de la amplitud de miras, la generosidad, la alegría y la humanidad que son el santo y seña de Andalucía.
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Andalucía es una realidad viva, cambiante, moderna. Es mucho más que unas coordenadas geográficas: es una manera de entender la vida. Una forma luminosa, profunda y sencilla de recordarle al mundo las cosas que de verdad importan y la necesidad de una fraternidad superior a todas las controversias que nos aíslan y separan. Somos una sociedad expansiva, inquieta, soñadora; gente tenaz, luchadora, trabajadora. Aquí miramos con reverencia el cielo que nos cubre y los mares que nos bañan, la nieve de nuestras montañas y el dorado de nuestros desiertos; los bosques y las marismas; la verdad de nuestros campos y la vitalidad de nuestras ciudades. Andalucía son sus hablas, sus costumbres, sus recuerdos. Andalucía es la determinación de no rendirnos nunca. Andalucía es la que exige su lugar en una España de iguales, sin privilegios ni desniveles. Andalucía es también la que sufre, la que hay que mejorar y cuidar. Los andaluces somos capaces de los mayores esfuerzos y de las más festivas alegrías. Somos lo que hemos hecho juntos y lo que haremos entre todos. Somos la Europa del Sur reclamando al mundo lucidez, sensatez, sensibilidad, moderación, civilización, humanidad.
Andalucía es una maceta de hierbabuena y un centro de inteligencia artificial; una mina de cobre y un generador de energías renovables; un baile flamenco y un epicentro tecnológico mundial; el verso de un poeta y una punta de lanza de la digitalización; museo de arte y centro de ciberseguridad; brasero de cisco e hidrógeno verde. Sin perder sus esencias, Andalucía se redescubre a diario, avanza, afronta nuevos desafíos, porque el porvenir no espera a quienes se duermen en un pasado embellecido por el recuerdo; ni siquiera es de los que esperan a que aparezca lo nuevo, porque en esos casos lo que suele llegar es sólo decadencia o fatalidad. El porvenir es de quienes lo buscan con determinación. Y en esa búsqueda, bajo una bandera blanca y verde que lleva cosidos nuestros más firmes principios y nuestros más rectos valores, está la Andalucía de hoy abriendo camino.
Hoy celebramos lo que fuimos, lo que somos y lo que vamos a ser. Hoy, ante un nuevo 28 de Febrero, honramos la memoria con más opciones de futuro. Hoy, en este territorio infinito del corazón que es el sentimiento de Andalucía, nos reunimos todos los andaluces, los de todas partes, para proclamar de nuevo al mundo que mire hacia el Sur, este Sur, que es un clamor de libertad, justicia e igualdad, un lugar donde es posible soñar, donde siempre cabe una esperanza mayor y donde creer en uno mismo es una condición básica de la búsqueda de la felicidad.
Por una Andalucía mejor. Por todo cuanto queda por hacer. Por los sueños cumplidos y por los que vamos a cumplir. Por creer, por soñar, por decir, por trabajar, por compartir, por comprender, por pensar, por avanzar, por volver, por venir. Por el esfuerzo de todos. Por hacer de Andalucía mucho más que un lugar.
Feliz 28 de Febrero. Feliz Día de Andalucía.