Andalucía impulsa y fortalece la atención a las personas con enfermedades crónicas

El Consejo de Gobierno ha tomado conocimiento de la aprobación del Plan Andaluz de Atención a la Cronicidad (PAdAC) para el periodo 2025-2028, desarrollado por la Consejería de Salud y Consumo, cuyo objetivo general es prevenir las enfermedades crónicas y mejorar la calidad de vida de las personas con estas patologías mediante una nueva organización de la asistencia sanitaria que promueva la personalización de la atención basada en el valor y la adecuación de los recursos a las necesidades y expectativas de cada persona, garantizando la equidad en salud, la eficiencia y la calidad de la atención. El plan se enmarca en la apuesta de la Junta de Andalucía por mejorar la calidad de vida de la ciudadanía, especialmente ante el progresivo envejecimiento de la población y el impacto de las enfermedades no transmisibles.

Las enfermedades crónicas, también denominadas Enfermedades No Transmisibles (ENT) por la Organización Mundial de la Salud (OMS), son de larga duración y están influenciadas por factores genéticos, fisiológicos, ambientales y de comportamiento. En Andalucía, la creciente prevalencia de estas patologías, junto con el envejecimiento demográfico, ha impulsado la necesidad de una reorganización del sistema sanitario para optimizar la atención a los pacientes con necesidades complejas de salud. Así, el PAdAC se presenta como una planificación estratégica para mejorar la atención sanitaria en Andalucía, garantizando la equidad en el acceso a los recursos y reduciendo las desigualdades en salud.

De esta forma, la Consejería de Salud y Consumo apuesta por el impulso y el fortalecimiento de la atención a la cronicidad en el sistema sanitario público de Andalucía, así como a la necesidad de afrontar uno de los mayores retos del sistema de salud, como es la atención a las personas con enfermedades crónicas y sus necesidades complejas de salud.

El plan está estructurado en cinco líneas estratégicas, de las que se derivan 22 objetivos específicos y 55 acciones concretas para su implementación. La primera de las líneas estratégicas es aprender a cuidarnos para vivir más años con buena salud y se pretende fomentar la salud desde la infancia a través de la promoción de hábitos saludables y la acción comunitaria. La segunda línea aborda un modelo de cronicidad que cuenta con las personas y se basa en el valor; así se pretende mejorar la atención de las enfermedades crónicas a través de un enfoque centrado en las personas. La tercera línea estratégica pretende mejorar la atención a las personas con enfermedades crónicas complejas mediante un enfoque proactivo y personalizado, conociendo los problemas y necesidades de las personas en situación de cronicidad compleja para intervenir de forma anticipada.

Con la cuarta línea se quiere mejorar la atención a las personas con enfermedades crónicas a través de la investigación, la innovación y la transferencia del conocimiento. Por último, la quinta línea pone la salud digital al servicio de las personas, mejorando la atención a la cronicidad mediante la implementación de herramientas digitales.

De esta forma, la implementación del plan se basa en un enfoque colaborativo, con la participación de profesionales sanitarios y la implicación de la ciudadanía en su salud. La digitalización de la atención sanitaria también jugará un papel clave en la mejora de la eficiencia y el acceso a los servicios de salud.