El 6 de marzo, nuestras alumnas de la ED 125 de Atención sociosanitaria a personas en situación de dependencia en instituciones sociales, subvencionada por la CAM y gestionada por ASISPA, visitaron la exposición inmersiva “Ecos del Océano” en el Espacio Fundación Telefónica.
Florence Nightingale fue una de las pioneras de la enfermería moderna y, durante la Guerra de Crimea (1853-1856), observó que las condiciones del entorno influían directamente en la salud de los pacientes. Implementó, entre otras, medidas como:
- Iluminación adecuada para mejorar el bienestar.
- Silencio y tranquilidad para favorecer el descanso.
Su enfoque revolucionó la enfermería y hoy en día sigue siendo la base del modelo ambientalista de la enfermería.
Con la exposición «Ecos del Océano» en el ámbito de la geriatría y ayuda a la dependencia, podemos centrarnos en la importancia del ambiente terapéutico en la recuperación y bienestar de los adultos mayores.
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- El entorno influye en la salud
o «Ecos del Océano» puede generar un entorno relajante a través de imágenes, sonidos y colores marinos - Estimulación sensorial y bienestar
o Los sonidos del mar, la brisa y la luz natural pueden reducir el estrés y mejorar la memoria en adultos mayores. - Efecto terapéutico del arte y la naturaleza
o La exposición puede usarse como terapia no farmacológica, estimulando emociones positivas en personas con demencia - Aplicación en geriatría
o En residencias de mayores, adaptar espacios con sonidos y colores del océano puede mejorar el bienestar emocional y cognitivo
- El entorno influye en la salud
En conclusión:
La exposición «Ecos del Océano» puede utilizarse como un recurso para aplicar el modelo ambientalista de Nightingale en dependencia, mejorando la calidad de vida de los mayores a través de un entorno terapéutico.
Activando los sentidos
¿Cómo se han sentido las alumnas realizando esta experiencia?
Ya desde el inicio, debían subir a la 4º planta, donde está la exposición, con los ojos tapados con un antifaz. Incluso perdiendo la orientación sobre si subían o bajaban.
El hecho de ir a un entorno desconocido y dependiendo de la guía de otra compañera adaptando el rol de auxiliar, les hizo sentir el miedo, inseguridad y vulnerabilidad de las personas usuarias.
“El confiar en la profesional, no implica el no tener miedo”
No sólo hay que hacerles sentir confianza, hay que mostrar empatía ante lo que sienten ya que es clave para su bienestar emocional y mental.
Comenzaron la sala de bienvenida en la que debían sentarse y experimentar las vibraciones y sonidos relajantes, siendo una excelente estrategia para mejorar la experiencia sensorial y terapéutica para ellos y aprendiendo a aplicarla en adultos mayores, especialmente en aquellos con demencia, ansiedad o problemas de movilidad, convirtiéndolo en un espacio innovador de relajación y estimulación para adultos mayores.
Durante el recorrido por las diferentes áreas llenas de pantallas gigantes y preguntándoles cómo se imaginaban el espacio, qué elementos podía incluía, fueron muy curiosas las respuestas, ya que no se imaginaban que fuera así.
Pensaban en algo más parecido a una sala Snowzelen, llena de tubos de colores y burbujas…
Ha sido una experiencia muy gratificante a nivel pedagógico.
