La Facultad de Magisterio de la Universitat de València ha puesto en marcha una iniciativa para recoger y enviar material a los colegios devastados por las inundaciones. La acción ha conseguido recoger material dado por instituciones educativas, ayuntamientos y particulares, que, una vez clasificado, ha empezado a ser distribuido por los colegios afectados.
La iniciativa se hizo pública mediante las redes sociales y ha sido escuchada en diferentes territorios de toda España y de países europeos. La Facultad se ha convertido en un centro de recogida y clasificación del material, que ahora ha empezado a llegar a los colegios necesitados.
“El equipo decanal pensó cómo podía ayudar mejor a paliar los efectos del desastre y ha sido haciendo aquello que sabe: ayudando los centros escolares”, afirman desde el centro. “Por tanto, y con el visto bueno del Vicerrectorado de Sostenibilidad, Cooperación y Vida Saludable, y en coordinación con la delegada de la Rectora para Cooperación, organizamos una recogida de material escolar para los centros afectados”, indican. Se hizo un llamamiento a alumnado, PDI y PTGAS para hacer turnos a lo largo de la semana del 11 al 15 de noviembre. La respuesta ha estado masiva, y después de establecer la infraestructura (noticia en redes y web, punto de entrega de material, punto de triaje y clasificación y zona de almacenamiento, el lunes 11 de noviembre se ha empezado a repartir.
“La respuesta ha sido impresionando (el martes teníamos ya más de 50 cajas de material recogidas). Además, nos han llamado muchas asociaciones, ayuntamientos y colegios de toda España, también de Francia y Alemania, para ofrecernos su ayuda y enviarnos material”, indica la vicedecana María Alcantud. “Están llegando furgonetas enteras de material escolar con el cual estamos pudiendo cubrir las necesidades de los centros educativos que se han puesto en contacto con nosotros o con el vicerrectorado”, añade.
Los centros más afectados por las inundaciones han sido los de infantil y primaria, porque se sitúan en plantas bajas. El material solicitado, y que está siendo recogido y enviado, está compuesto de bolígrafos, cartulinas A4, ceras finas y gruesas, folios blancos, goma, pegamento, tijeras, lápices, papel de colores, pintura de dedos, pinceles, plastilina… Además, material de estimulación sensorial, mobiliario y juguetes sencillos, como arcos iris Waldorf, arena kinetica, bicicletas de varios tamaños, cunas de madera, carretillas de plástico para el arenero, carretes de limpieza de juguete, casetas de plástico para el patio, juegos de causa-efecto, como juguetes musicales o con luces. Finalmente, juegos de consultas médicas, juegos de cocinitas, juegos de mesa, libros de lectura, cuentos, colchones plegables para actividades de gimnasia infantil, colchones pequeños rectangulares individuales, material deportivo, materiales sensoriales (pelotas de texturas, cintas, etc.), motos de plástico, muñecas, bloques de construcción traslucidos, palas, cubos, rastrillos…
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