La Asamblea Ciudadana Navarra comienza sus sesiones deliberativas sobre el cambio climático

Las 30 personas de la sociedad civil navarra elegidas aleatoriamente, entre las 560 que se ofrecieron voluntarias, para integrar la Asamblea Ciudadana sobre el Cambio Climático han comenzado este fin de semana a realizar sus primeras sesiones deliberativas, que culminarán el próximo mes de junio con el objetivo de elaborar propuestas o recomendaciones que respondan a la pregunta “¿qué debemos hacer en Navarra ante el cambio climático de manera efectiva y socialmente justa?”.

Las personas integrantes de la Asamblea Ciudadana Navarra, una iniciativa de democracia deliberativa entre la ciudadanía sin precedentes en la Comunidad Foral que pilota la Oficina de Cambio Climático de la Dirección General de Medio Ambiente del Gobierno foral, recibieron durante el pasado mes de febrero varias sesiones formativas por parte de un grupo de 12 personas expertas que les aportaron información y conocimiento científico sobre las causas, impactos y estrategias ante el fenómeno de la emergencia climática. Y entre la tarde de ayer viernes y hoy sábado, la asamblea ha iniciado ya sus primeros debates en el salón de actos del edificio acristalado del Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente.

Antes de iniciarse de la primera sesión deliberativa presencial, el consejero de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Ejecutivo foral, José Mª Aierdi, ha dado la bienvenida a las personas que conforman la Asamblea Ciudadana, agradeciendo su implicación y compromiso, y ha destacado que se trata del “primer proceso deliberativo estructurado que se impulsa en Navarra, donde es la propia sociedad civil directamente, y no sólo los poderes públicos, la que reflexiona, aporta propuestas o soluciones y tiene la oportunidad de orientar estrategias sobre los principales retos a los que se enfrenta la Comunidad”, al tiempo que ha subrayado que se trata de una experiencia replicable a otros ámbitos.

La emergencia climática, una oportunidad de cambio

“La realidad de la emergencia climática, que nos interpela a empresas, administraciones públicas, ámbito científico o agentes sociales, y también a la propia ciudadanía en su conjunto, supone una indudable amenaza de orden planetario, pero también una oportunidad para adaptarnos al cambio y transformar desde la acción local nuestra forma de producir, consumir o vivir y para reorientar las políticas sectoriales hacia un modelo de vida más sostenible y saludable, y la iniciativa ciudadana no puede quedarse al margen de un reto de esta envergadura”, ha señalado Aierdi al explicar los objetivos de la asamblea del cambio climático.

La asamblea está formada por 30 personas elegidas aleatoriamente a través de un sorteo –entre las 560 que se inscribieron en el portal Participa Navarra-, que responden a diferentes criterios de edad, género, formación, origen, lugar de residencia en distintas zonas o núcleos poblacionales de Navarra, de manera que integran un muestreo representativo de la realidad social de la Comunidad Foral.

Este órgano ciudadano participativo terminará acumulando más de 40 horas en distintas sesiones, que se celebrarán los viernes por la tarde y sábados por la mañana –un fin de semana de cada mes, entre marzo y junio-, en cuyas deliberaciones los y las asambleístas estarán asistidas por un equipo dinamizador y el grupo de personas expertas para facilitar el conocimiento de los temas específicos que se abordarán en cada jornada.

Cuatro bloques temáticos

Las primeras sesiones deliberativas que se celebran entre ayer y hoy se centran en la distribución y consumo de alimentos, usos agrícolas o urbanísticos de suelo o cuestiones relacionadas con la planificación territorial, la primera de las grandes áreas temáticas que la propia asamblea definió en las primeras jornadas de trabajo preparatorias y formativas que celebró en febrero, con asistencia del grupo de personas expertas.

Los otros tres bloques temáticos –se abordará uno cada mes- se centrarán en el tejido económico, vinculándose con la energía y la movilidad; otra dimensión social que incluye la relación de la salud y la educación con el cambio climático y, finalmente, los ecosistemas en el medio natural y la biodiversidad.

El proceso de la iniciativa participativa culminará con la última convocatoria de junio y, a partir de ahí, la propia asamblea compilará los resultados y conclusiones de sus deliberaciones y elaborará un informe de propuestas y recomendaciones que en otoño elevará al Parlamento de Navarra.

La Asamblea Ciudadana es un compromiso recogido en la Ley Foral de Cambio Climático y Transición Energética aprobada al final de la pasada legislatura, así como la posterior creación, al inicio de este mandato, de la Oficina de Cambio Climático de Navarra, la unidad de la Dirección General de Medio Ambiente del Ejecutivo foral que ha sido encargada de poner en marcha esta iniciativa.

Toda la actividad de la Asamblea Ciudadana del Cambio Climático se recogerá en este enlace al portal oficial de Participa Navarra.