No obstante, Alberto Fesser señaló que Pamplona necesita mejoras específicas para consolidarse como referente en el sector cultural, como “una sala de exposiciones de arte contemporáneo, galerías de arte adicionales y salas de conciertos de tamaño medio”.
En cuanto a la programación, Fesser subrayó la necesidad de “actividades orientadas a jóvenes y al público infantil, así como de festivales de teatro contemporáneo y programas de mediación y animación cultural”. Fesser también recalcó la importancia de implementar políticas con una visión estratégica a largo plazo, que faciliten la coordinación entre instituciones, fomenten la participación ciudadana y apoyen la profesionalización del sector. “La cultura debe estar libre de injerencias políticas”, añadió.
Por último, el presidente de Fundación Contemporánea insistió en la necesidad de incrementar los recursos destinados a la cultura, especialmente, al “arte contemporáneo, la música y los festivales”. También apostó por mejorar la ley de mecenazgo y fomentar el patrocinio privado como una manera de lograr una estructura de financiación sólida que permita el crecimiento sostenido del sector en Pamplona.
Mayor capacitación en Navarra
Por su parte, Isabel Villanueva resaltó que el sector cultural en Navarra está compuesto en su mayoría por pequeñas empresas, muchas de las cuales tienen menos de cinco trabajadores. “El crecimiento en el sector está impulsado principalmente por profesionales autónomos, que representan un 60 % del total, aunque los sueldos se mantienen bajos, con una media de 20.000 euros anuales”, explicó. Sin embargo, Villanueva indicó que la capacitación en Navarra es notablemente “superior” a la media nacional, al igual que las políticas de género, que están muy avanzadas en comparación con otras regiones.
Comentó también que la música sigue siendo el sector cultural más valorado por el público en Navarra, lo que demuestra una base sólida sobre la cual se podrían desarrollar nuevas iniciativas culturales.
Clubes profesionales del Consejo Social
El Club Cultural es uno de los ocho clubes profesionales creados al amparo del Consejo Social, que se enmarcan en la línea de trabajo de este órgano relativa a la formación permanente orientada a profesionales en ejercicio, y responde a la previsión establecida en la Ley Foral del Consejo Social, que atribuye a este órgano la competencia de “impulsar, junto a los responsables académicos de la Universidad Pública de Navarra, una oferta de formación permanente dirigida a profesionales en ejercicio y adaptada a sus necesidades”.
El Consejo Social es el órgano colegiado de participación de la sociedad en la Universidad y actúa como elemento de relación entre las instituciones y el tejido social de la Comunidad Foral, por un lado, y la UPNA, por otro.