Gamificación e innovación, señas de identidad del galardonado proyecto
El proyecto «El viaje a Euroinnova» se desarrolla en dos partes que llevan a los estudiantes a través de un recorrido lleno de desafíos y aprendizajes. En la primera fase, los estudiantes avanzan por distintos escenarios mediante actividades interactivas, como masterclasses, juegos y talleres, que les permiten desarrollar competencias clave para la innovación. En la segunda etapa, los estudiantes ingresan en el Aula del Futuro, donde se integran herramientas digitales y dinámicas de inteligencia emocional en un entorno gamificado que mantiene el proceso de aprendizaje inmersivo y estimulante.
La narrativa del proyecto se presenta como una metáfora de la situación educativa actual. Aquí, los estudiantes deben llegar al claustro de inicio de curso en el Centro de Educación Euroinnova, que también representa el examen final de la asignatura. En su camino, deben enfrentar a Imperatrix Clorofila, un personaje que representa los obstáculos a la innovación y reside en la Isla Cloroverde. Este antagonista, como enemigo de la innovación educativa, simboliza las barreras que frenan el cambio y el progreso en la educación, lanzando desafíos a los estudiantes que buscan alcanzar su meta.
Para superar los retos de Imperatrix Clorofila, el proyecto enfoca el desarrollo de competencias, especialmente en el ámbito emocional, mediante dinámicas que invitan a reflexionar sobre las barreras internas que limitan la innovación. De esta manera, los estudiantes se vuelven más conscientes de cómo sus propias creencias y actitudes impactan su capacidad para innovar y tomar decisiones. Además, la gamificación aplicada a este proyecto conecta la experiencia con la realidad educativa y facilita la transferencia de los aprendizajes a su vida profesional.
Un reconocimiento a la pasión por la enseñanza
El proyecto «El viaje a Euroinnova» consolida a la Universidad Europea como un referente en innovación educativa, reforzando su compromiso de preparar a los estudiantes para los desafíos futuros mediante experiencias de aprendizaje únicas y prácticas. Basado en un modelo de aprendizaje experiencial, el proyecto refleja la convicción de que, a través de la innovación, es posible crear un entorno donde el aprendizaje se construya desde la práctica, permitiendo a los estudiantes «saber hacer» mediante el contacto, la reflexión y la experimentación.
Para los docentes que impulsan este proyecto, el galardón en los Premios SIMO EDUCACIÓN 2024 es un reconocimiento significativo. «Es una validación del trabajo que hemos realizado y una motivación para seguir investigando e innovando en el ámbito educativo, demostrando que el aprendizaje puede ser más dinámico, emocional, inclusivo y transformador», señala Ana García Pérez. Miguel Ángel Azorín López añade: «Es una fuente de satisfacción personal y profesional que te impulsa a seguir mejorando y creyendo en tu labor docente».
Ambos coinciden en que proyectos como «El viaje a Euroinnova» no solo enriquecen el aprendizaje de los estudiantes, sino que también muestran cómo la educación puede transformarse en una experiencia dinámica, emocional, inclusiva y verdaderamente transformadora.
