Destaca que son 5.000 millones de euros de deuda menos, lo que sitúa a CLM a la cabeza en condonación de deuda por habitante, y 100 millones al año de ahorro en intereses para reformar los servicios públicos, por lo que, si el PP se niega a esto, tendría que ser declarado como un “partido nocivo para esta tierra”.
Afirma que en Ciudad Real “debería ser el PP el que rompiera su pacto con Vox”, porque el Gobierno de Cañizares ya cedió anteriormente en otros asuntos, y porque se demuestra “lo difícil que es garantizar derechos y lo fácil que es ponerlos en cuestión cuando se dan poder y cancha en las instituciones a un partido intolerante como Vox”.
El diputado del grupo socialista en las Cortes regionales, Antonio Sánchez Requena, ha sostenido hoy que si el PP de la región no apoya la condonación de la deuda para Castilla-La Mancha, como ya ocurrió con su voto en contra del techo de gasto en el Congreso, “irá contra los intereses de Castilla-La Mancha” y “tendría que ser declarado como un partido nocivo para esta tierra”.
En rueda de prensa en la sede regional del PSOE, ha criticado que el PP esté pidiendo a diario más ayudas y subvenciones, “y cuando llega la hora de decidir cómo afrontamos esas inversiones y de dónde sacamos los recursos, el señor Núñez siempre van a la contra de los intereses de la región”.
Así, ha recordado el voto en contra de los ‘populares’ al techo de gasto, que suponía 230 millones de euros más para financiar en Castilla-La Mancha servicios públicos como la sanidad o la educación, “y ahora están en contra de que se condone la deuda”, ha lamentado, al tiempo que ha recordado que son alrededor de 5.000 millones de euros los que no tendría que devolver la región.
“Si no quieren que se condone esta deuda cuando encima Castilla-La Mancha es la que sale más beneficiada en términos de población ajustada y cuando es, también, de las más beneficiadas en relación al total de la deuda que mantiene la comunidad, es decir, estamos a la cabeza en condonación por habitante ajustado, 2.900 euros, más o menos, cuando la media nacional son 1.800 euros, también estamos los mejor situados en cuanto a la ratio de deuda, un 30 % cuando la media nacional está en el 26 %”, ha explicado.
Con ello, Sánchez Requena ha insistido en que Castilla-La Mancha sale mejor parada que comunidades como Madrid, Cataluña o Murcia, y ha aseverado que “si el PP se niega a esto, como viene negándose a otras cuestiones que suponen más ingresos para la región, tendremos que declararlo como un partido nocivo para esta tierra”.
Lo ha contrapuesto a la reivindicación que viene realizando el Gobierno del presidente Page desde el año 2017, lo que ha calificado de “lógico” al tratarse de una deuda que se ha ido generando fruto de la infrafinanciación que tiene la región para asumir con garantías las competencias que tiene asignadas.
Una deuda que también lleva el “nombre propio del PP y de Cospedal”, ha criticado, recordando que, en sus cuatro años de gobierno, duplicaron la deuda de 6.500 a más de 12.000 millones de euros, “a la vez que recortaron los servicios públicos, destrozaron el Estado del Bienestar y nos subieron los impuestos”, ha concluido.
“Debería ser el PP el que rompa su pacto de gobierno con Vox en Ciudad Real”
Sánchez Requena se ha referido, por otro lado, al malestar que PP y Vox están generando continuamente en Ciudad Real capital, y a las numerosas amenazas de ruptura del pacto de gobierno que tienen, y ha trasladado que “debería ser el PP el que rompiera su pacto con Vox” y “asumir una responsabilidad clara de valores democráticos, de valores de convivencia”.
Ha lamentado que el equipo de Gobierno de Francisco Cañizares ya cedió con la eliminación de la unidad policial que protegía a las víctimas de violencia de género, “han cedido cuando surgió el veto de una activista contra la trata y ahora están cediendo ante un tema como es ese famoso cuadernillo que también demuestra lo difícil, por un lado, que es garantizar derechos y lo fácil que es ponerlos en cuestión e involucionar cuando se dan poder y cancha en las instituciones a un partido absolutamente intolerante como es Vox”.