La Universidad Pública de Navarra (UPNA), gracias a un proyecto de divulgación concedido por el Vicerrectorado de Proyección Universitaria, Cultura y Divulgación, respalda este curso veinte proyectos vinculados al Bachillerato de Investigación (Bi+) en catorce centros de educación secundaria de la Comunidad Foral. Un total de 27 docentes de la institución académica, que han propuesto los citados proyectos, asesoran al alumnado para la puesta en marcha de los trabajos.
El estudiantado que se inscribe en el Bachillerato de Investigación realiza, durante los dos cursos de esta etapa educativa, una investigación académica formal, que entrega por escrito y expone oralmente en la fase intermedia y en la final. Además, recibe formación específica en la asignatura Iniciación a la Investigación y cuenta con la tutoría de una profesora o un profesor del centro educativo donde cursa los estudios, junto a la asesoría del profesorado de la UPNA.
Además, el alumnado y sus profesores pueden consultar el libro “Iniciación a la investigación: guía para estudiantes y docentes”, editado por la UPNA. La obra se repartió gratuitamente entre una decena de centros de educación secundaria de la Comunidad Foral interesados en esta iniciativa.
Estudiantes y profesores de secundaria y docentes de la UPNA posan en el campus de Arrosadia antes de una sesión de presentación de trabajos.
Proyectos tutorizados por la UPNA este curso
En el presente curso, las investigaciones asesoradas por el profesorado de la UPNA abarcan temáticas sociales, como “Prevención de la violencia de género: una mirada desde la adolescencia” (a cargo de Rebeca Echávarri Aguinaga y Sara Martínez de Morentin Osés).
Otros trabajos presentan un carácter educativo. Se trata de “Explorando la influencia de ChatGPT en la educación: análisis y perspectivas de uso estudiantil en el proceso de aprendizaje” (Raquel Chocarro Eguaras), “El ocio audiovisual y literario en la alfabetización genética del alumnado de secundaria y bachiller” (Maribel Zudaire Ripa e Iria Vázquez Urío) y “El uso de juegos de mesa para el aprendizaje de la historia y la difusión del patrimonio” (Gemma Piérola Narvarte).
Los hay de carácter medioambiental, caso de “Conoce la contribución de tu instituto al desarrollo sostenible: midiendo la sostenibilidad” (Francisco Javier Husillos Carqués), “Vida en la oscuridad: la biodiversidad que no vemos” (María Napal Fraile), “Identificando el valor de lo autóctono: variedades agrícolas, razas y prácticas agro-ganaderas que definen las raíces de Navarra” (Cristina Arroqui Vidaurreta e Idoya Fernández Pan) y “Los alimentos también respiran” (Carmen Barba González-Albo).
También hay espacio para las humanidades con “Mujeres represaliadas en Pamplona: una mirada desde la justicia ordinaria en la posguerra” y “¿Y si… hacemos barrio? El poder de la cultura popular en barrios y municipios” (ambos, de Gemma Piérola).
Un estudiante de Bachillerato explica su trabajo sintetizado en un póster, como se realiza en los congresos de investigación.
La tecnología, temática más repetida
Una buena parte de los proyectos tienen que ver con la tecnología. Es el caso de “Aplicación de la inteligencia artificial como herramienta de análisis de la bolsa” (José Enrique Armendáriz Íñigo), “Generación de ambientes sonoros mediante tecnologías de audio 3D” (Ricardo San Martín Murugarren y Rubén Eguinoa Cabrito), “Validación de la herramienta Hippy” (Nora Millor Muruzábal y Ander Goñi Medrano) y “Creando servicios en la Ciudad Cognitiva” (Francisco Javier Falcone Lanas, Leyre Azpilicueta Fernández de las Heras, Mikel Celaya Echarri, Peio Iturri López, Imanol Picallo Guembe y Erik Aguirre Gallego).
En varios casos, se abordan cuestiones relacionadas con las ciencias básicas, como “La geología y la química como herramientas de la historia” (Isabel S. de Soto García) y “Así funciona la Tierra: ¿te atreves a montar las piezas?” (Francisco Javier Sanz Morales).
También se tratan cuestiones relacionadas con la salud. Así ocurre con “¿Por qué se caen las personas mayores en Navarra? (Nora Millor y Maider Sada Allo), “Cómo el uso de tecnologías motivacionales (‘apps’ deportivas y pulseras/relojes de actividad) ayuda a los usuarios a desarrollar hábitos saludables” (Miriam Alzate Barricarte) y “Diseño de un sistema de control postural en la silla” (Nora Millor).
Finalmente, las temáticas económicas no se dejan de lado gracias al proyecto “Las criptomonedas, ¿otra burbuja especulativa?” (Henrike Galarza Prieto).
Los catorce centros de educación secundaria donde se desarrollan estos proyectos son: IES Barañáin, IES Ribera del Arga (Peralta), IES Valle del Ebro (Tudela), IES Pablo Sarasate (Lodosa), IES Sancho el Mayor (Tafalla), Colegio Luis Amigó (Mutilva), Ikastola Paz de Ziganda (Villava), Askatasuna BHI e IES Ibaialde (ambos, de Burlada), IES Basoko, IES Julio Caro Baroja, IES Plaza de la Cruz, Colegio Hijas de Jesús y Liceo Monjardín (todos, de Pamplona).
Colaboración desde 2021
La UPNA suscribió en abril de 2021 un convenio con cuatro institutos de educación secundaria para impulsar el Bachillerato de Investigación, “vía complementaria a los itinerarios ordinarios de Bachillerato e instrumento idóneo para la profundización en el conocimiento y desarrollo de la actividad investigadora”, según recogía el texto.
En virtud de aquel acuerdo, la UPNA se comprometía a establecer temáticas de investigación, asesorar en su desarrollo y procurar a dicho alumnado el desarrollo de las labores de investigación en las dependencias ubicadas en los campus de Pamplona y Tudela, especialmente, en laboratorios, aulas temáticas e instalaciones vinculadas. Asimismo, se establecía que el profesorado universitario participaría como evaluador externo profesional de los proyectos de investigación que realizara el alumnado, bien de manera directa (participación en jurados o en evaluaciones) o indirecta (asesoramiento o consulta de dudas).