El CEO de OpenAI, Sam Altman, el CEO de SoftBank, Masayoshi Son, y el presidente de Oracle, Larry Ellison, participaron el martes en una ceremonia en la Casa Blanca junto al presidente Donald Trump y otros líderes tecnológicos para anunciar una inversión masiva del sector privado en la infraestructura de inteligencia artificial (IA) en los Estados Unidos.
Las tres compañías se asociarán para crear una nueva «empresa» de infraestructura de IA llamada Stargate. Trump anunció que las compañías contribuirán inicialmente con 100 mil millones de dólares, con planes de aumentar la inversión a 500 mil millones de dólares en los próximos años.
Stargate se encargará de «construir la infraestructura física y virtual para impulsar la próxima generación de IA», que incluirá centros de datos en todo el país, según explicó Trump.
Este esfuerzo se describe como el «proyecto de infraestructura de IA más grande de la historia». Ellison mencionó que el primer proyecto de datos, que abarcará 1 millón de pies cuadrados, ya está en construcción en Texas.
Los líderes del sector de la IA han advertido durante meses que se necesitan más centros de datos, así como los chips, electricidad y recursos hídricos necesarios para operarlos, a fin de impulsar sus ambiciones de IA en los próximos años.
Altman destacó la importancia del proyecto al decir que «será el proyecto más importante de esta era» y agradeció al presidente Trump por su apoyo, indicando que sin él no sería posible llevarlo a cabo.
Oracle es uno de los mayores operadores de centros de datos en Estados Unidos, y SoftBank cuenta con los recursos financieros necesarios para financiar la expansión de la infraestructura de IA, que se espera que cueste miles de millones de dólares.
Altman ha instado anteriormente a los funcionarios estadounidenses a ayudar en la construcción de esta infraestructura para garantizar que Estados Unidos se mantenga por delante de China en la «carrera armamentista» de la IA, dado que la IA tiene el potencial de afectar desde la economía hasta las capacidades militares.
También se reportó que Altman se reunió con Masayoshi Son el año pasado para solicitar inversiones en nuevas plantas de semiconductores para fabricar chips de IA.
Altman, quien asistió a la inauguración de Trump el lunes, expresó su creencia de que Trump «será muy bueno» en atraer inversiones en infraestructura de IA hacia Estados Unidos y manifestó su disposición a trabajar con su administración en este tema.
En una entrevista con Fox News, Altman explicó que la infraestructura es fundamental para la IA, ya que requiere grandes cantidades de poder, chips de computadora y centros de datos, elementos que deben ser construidos en Estados Unidos para mantener el liderazgo en tecnología e innovación.
En un documento de políticas publicado la semana pasada, OpenAI señaló que la inversión en infraestructura de IA en Estados Unidos puede garantizar que las herramientas de IA del país superen a las tecnologías chinas, además de crear nuevos empleos y oportunidades económicas en Estados Unidos.
El informe estimó que hay «175 mil millones de dólares en fondos globales esperando ser invertidos en proyectos de IA». Si Estados Unidos no atrae estos fondos, estos fluirán en dirección a proyectos respaldados por China, lo que fortalecería la influencia global del Partido Comunista Chino, advirtió OpenAI.
Por su parte, Oracle destacó que el proyecto Stargate «asegurará el liderazgo estadounidense en IA, creará cientos de miles de empleos en el país y generará enormes beneficios económicos para el mundo entero».
Además, afirmó que este proyecto no solo apoyará la reindustrialización de Estados Unidos, sino que también proporcionará una capacidad estratégica para proteger la seguridad nacional de EE.UU. y sus aliados.
Foxconn afirmó haber invertido mil millones de dólares en el estado y mantiene un importante sitio de fabricación de servidores de datos, aunque la instalación originalmente anunciada por se ha convertido en un centro de datos de Microsoft para capacitar a empleados y fabricantes sobre el uso de la inteligencia artificial.
Finalmente, Trump también revocó una orden ejecutiva del expresidente Joe Biden en 2023 que buscaba monitorear y regular los riesgos de la IA, marcando una diferencia importante en la dirección política hacia la inteligencia artificial bajo su administración.
